La relación entre Mohamed Salah y Sadio Mané es actualidad en el Reino Unido. La posibilidad de que el egipcio abandone Anfield tras sus declaraciones en entrevista con el diario español AS le colocan en el centro de la rumorología y el último partido contra el Crystal Palace (0-7) agitó el tarro de las polémicas. En el minuto 56, Jürgen Klopp decidió sacar del terreno de juego a Mané para introducir a Salah en su lugar. En ese momento, el choque estaba más que decidido (0-3), aunque luego llegarían cuatro tantos más, dos de ellos con la firma de Mo. El primero se marchó visiblemente enfadado del terreno de juego y sobre una posible enemistad entre ambos le han preguntado a Peter Crouch en su columna semanal de preguntas y respuestas del Daily Mail.
El exdelantero del propio Liverpool tiene claro que su relación fuera de los terrenos de juego no les afectará sobre él, pero considera que es muy posible que no sean exactamente amigos. "Salah llegó como un extremo, pero se ha convertido en uno de los delanteros más prolíficos de Europa, una máquina de hacer goles. Estaba en el lugar indicado en su primer y segundo gol contra el Crystal Palace, para completar el 0-7, fue maravilloso", comenzaba para contextualizar antes de entrar en materia.
"La cara de Mané, siendo sustituido, fue un poema. Estaba furioso y lo sé a ciencia cierta, porque cuando hueles sangre como delantero, lo último que quieres hacer es salir del campo. ¿Son él y Mané amigos? Lo dudo. Pero no importa. Yo he tenido compañeros de delantera que sabía que nunca les gusté. Nunca me impidió hacer mi trabajo", finalizaba el ex del Liverpool.
Toda esta polémica gira en torno al sentir de Salah, quien, además de no descartar al Real Madrid o el FC Barcelona en el futuro, reconoció haberse sentido contrariado al no haber sido capitán contra el Midtjylland. Así como su excompañero de selección Mohamed Aboutrika arrojó más leña al fuego al afirmar que el delantero no "está feliz en Liverpool". Sea como fuere y como el propio Crouch desliza, ello no le debe impedir realizar su trabajo en el campo, como pudo comprobar el Crystal Palace recientemente. (D)