El ariete lleva dos años en Guadalajara, y desde hace casi uno, no marca un gol en la Liga MX
GUADALAJARA -- Oribe Peralta, delantero de Chivas, llegó al cuadro tapatío para el Apertura 2019 en uno de los traspasos más polémicos de la Liga MX después de su pasado en el América.
El ariete lleva casi dos años en Guadalajara y desde hace casi uno, no marca un gol en la principal competencia del país.
Fue el 31 de enero de 2020 la última vez que el ‘Cepillo’ marcó un gol en Liga MX, casualmente, ante Atlético San Luis, rival al que los rojiblancos enfrentarán este jueves en el primer duelo de la jornada 3 del Guard1anes 2021.
Aquella noche, en el Estadio Alfonso Lastras, Oribe se hincó y elevó las manos al cielo. Agradeció la oportunidad de marcar el penal con el que el cuadro tapatío se puso 0-2 en el marcador apenas el minuto 35, pese a que después los potosinos empataron el electrónico.
Sin embargo, la cuota goleadora de uno de los héroes del oro olímpico ya iba a la baja para ese entonces. Y es que antes del gol en liga ante los tuneros, acumuló un año y cuatro meses sin perforar las redes, puesto que su último tanto con las Águilas en Liga MX fue el 21 de septiembre de 2018 ante Puebla.
Oribe está a 11 días de cumplir un año sin marcar un gol con la playera rojiblanca. Si bien su cuota de minutos es de las más bajas de la plantilla, el veterano de 37 años no ha dado indicios de estar cerca de su mejor nivel, aquél que lo catapultó a ser un icono del americanismo.
Los minutos que Peralta suma en el terreno de juego, solo en Liga MX, son 504, lo que significa que ha jugado una tercera parte de un torneo completo. Entre lesiones y la baja de juego, el ‘Cepillo’ ha quedado a deber, en la cancha, lo que la directiva esperaba del ariete.
Sin embargo, este jueves, ante San Luis, podría romper la marca que tiene sin anotar en Liga MX, misma que, curiosamente, ante el equipo que, por un momento, pareció regresarle el gol a una de las últimas figuras del futbol mexicano.