Después del gol del descuento (3-2) del Napoli, que llegó por intermedio de Mertens, el portero David Ospina y el atacante Edin Dzeko protagonizaron un violento choque de cabezas cuando disputaban una pelota afuera del área. Ambos se fueron al suelo y causaron gran preocupación.
Tras el impacto, el jugador de la Selección Colombia caminó unos pasos y se desplomó, lo que encendió las alarmas. Sus compañeros lo asistieron de inmediato mientras llegaba la asistencia médica. Al final, por fortuna, la situación no pasó a mayores y ambos jugadores terminaron el partido con las cabezas vendadas.
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