Fueron 23 segundos en la que la voz de Kimberly García se oyó por todo lo alto con un pedido masivo, pero que ahora, ella como campeona mundial lo dijo frente al mismo presidente de la República Pedro Castillo. No necesitó mucho discurso, solo las palabras concretas para hacerse sentir.
ENTREVISTA: “Esto ha sido por el apoyo de las empresas y mi familia. De la Federación y del IPD, casi nada”
“Quiero agradecer por estas premiaciones y reconocimientos que uno como deportista siempre valora. pero también aprovecho y pido aumentar el presupuesto para el apoyo para todos los deportes. El deporte tiene poder de cambiar vidas de niños, jóvenes y adolescentes”, dijo Kimberly García. No necesitaba decir más. Además, no solo pensó en la marcha, su disciplina, o en el atletismo. Su mirada apunta a todo el deporte. Sabe que el éxito debe ser para todos.
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Fue una ceremonia que se hizo más larga por la espera que por su duración. Palacio de gobierno se llenó de autoridades y medios de comunicación para hacer honor a la más grande alegría que el deporte peruano ha tenido. En su tercer homenaje del día la sonrisa y humildad de kimberly atendió a todos quienes se acercaban a dedicarle unas palabras.
Ni los muchos protocolos para entrar a Palacio de Gobierno ni el frío le quitaron la sonrisa a Kimberly. Acompañada de su familia -padre, madre y hermano-, la felicidad era completa. También estuvo su entrenador Andrés Chocho, quien pese a ser ecuatoriano tuvo el gran gesto de llevar una escarapela peruana en el pecho. Su compromiso también es total.
Sencilla y educada, como la criaron sus padres, Kimberly no dudó en agradecer los honores: un premio de 100 mil soles, el PAD permanente (sueldo de deportistas hasta el final de su carrera) y la develación de los Laureles Deportivos), pero no tuvo reparos en decir alto y fuerte frente a las cámaras y en televisión nacional que para que sigan los logros de los deportistas peruanos se necesitaba una mayor inversión del Estado.
Tras los actos protocolares, una relajada Kimberly junto a su entrenador, acompañados del presidente del Comité Olímpico Peruano Renzo Manyari, aparecieron en el patio de Palacio para una breve conferencia. Portando orgullosa sus dos medallas de oro, la joven de Huancayo hablo de su otro objetivo.
“Tengo un sueño y es el sueño olímpico y seguiré entrenando para eso”, aseguró y fue clara en decir que el dinero recibido lo invertirá en su formación para ir a París 2024 y cobrarse la revancha personal que tiene luego del abandono en Tokio 2020.
Kimberly ha puesto en evidencia que las autoridades de gobierno solo voltean a ver al deporte luego de un éxito. Como ella mismo lo dijo, no se pueden esperar grandes logros si la apuesta es mínima. Que sus palabras sean un llamado de atención y una luz de esperanza para que el deporte nacional entre en una nueva era.
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