Argentina venció a Polonia 2-0 y avanzó a los octavos de final, un encuentro en el que la expectativa era grande por el choque de dos estrellas, Lionel Messi y Robert Lewandowski, ambos capitanes de sus respectivas selecciones, por lo que al inicio del encuentro se dieron la mano e intercambiaron banderines, todo de una manera muy cordial entre ambos, pero al final del encuentro se dio un roce que calentó los ánimos.
En tiempo de compensación, justo al minuto 94, Messi tomó la pelota a mitad de la cancha, cerca de él se encontraba Robert Lewandowski, por lo que La Pulga decidió encarar al artillero del Barcelona y recortarlo por la izquierda, pero el capitán polaco imprimió una pegajosa marca y los correteó y comenzó a jalarlo de la playera, situación que generó molestia en el argentino, quien detuvo su camino y fastidiado volteó a ver al árbitro de Países Bajos Danny Makkelie, quien marcó falta a favor de Argentina.
Tras la marcación del nazareno, Lewandowski se acercó a Messi para ofrecerle disculpas y le estiró la mano, pero Leo con rabia en el rostro no volteó a ver al polaco, quien se quedó con la mano estirada y con asombro en la cara.
Necesito tatuarme a Messi esquivando el saludo de Lewandowski pic.twitter.com/pCO4r3WHcU
— Emilyk ???????? (@EmilioRanucoli) November 30, 2022
El enojo de La Pulga se esfumó rápidamente, cuando sonó el silbatazo final y la cosa no pasó a mayores. En el camino a los vestidores, Robert Lewandowski y Lionel Messi se encontraron, se saludaron cordialmente e incluso intercambiaron algunas palabras al oído.
Al final, La Pulga no reveló lo que se dijeron al final del cotejo, únicamente indicó: “Me enseñaron que lo que se dice en la cancha, queda en la cancha”.
La frustración de Messi comenzó al minuto 37 cuando La Pulga no pudo hacer efectivo un penalti, con el cual se hubieran ido al frente, pero el arquero Wojciech Szczęsny detuvo el zurdazo del jugador del Paris Saint Germain.
FCM