Ya indicamos ayer en SÚPER LUCHAS que el bombazo informativo del año (por ahora) en WWE no cesa de generar nuevas informaciones que actualizan, complementan o desmienten las ya sabidas durante las últimas 48 horas. Nada por ahora puede ser aseverado en firme, exceptuando las dos noticias básicas de la que han partido las demás, ya que devienen las únicas por ahora confirmadas por la propia empresa: la inminente separación de marcas y la retransmisión en vivo de SmackDown a partir del 19 de julio en USA Network.
El bueno de Dave Meltzer se convierte en estos días en la fuente más prolífica de noticias para intentar hacernos una idea de lo que nos deparará este nuevo movimiento. En el episodio de ayer de Wrestling Observer Live, el periodista neoyorquino compartió con los aficionados nuevos pormenores acerca de la división de marcas, según comentarios entre bastidores y fuentes de su confianza. La información más relevante de las lanzadas ayer fue la que indica que Raw y Smackdown serán shows claramente diferenciados e independientes, pero con la excepción de dos citas por temporada.
Según Meltzer, WWE planea establecer dos grandes episodios de Raw cada año que incluirán a todo el elenco de la empresa. Uno de estos episodios tendrá lugar el día después de WWE SummerSlam y el otro se fijará para la jornada posterior a WrestleMania. ¿Podrían usarse estos “Super Raw” como escenario de un draft anual, o sólo servirá como gran escaparate tras los eventos más importantes del año? Es previsible que la singularidad de estas citas hagan disparar los ratings, asegurando una gran audiencia al menos dos veces por temporada.
Shawn Michaels se despide de los aficionados en el Monday Night Raw realizado el día después de WrestleMania XXVI / WWE ©
Más sobre el tema. Cada PPV será mixto, es decir, aunará ambas marcas, contando con los comentaristas de cada show correspondiente y también en términos de los carteles trazados. Así pues, no parece que respecto a las vacas sagradas de su programación (los eventos de pago por visión) WWE dé un giro drástico en su política.
Bajo la anterior separación, que se extendió de 2002 a 2011, y pese a que existían bastantes PPVs conjuntos, también podíamos ver otros tantos exclusivos de cada marca. Recordemos New Year´s Revolution (de 2005 a 2007), privativo de Raw. O Judgment Day (de 2003 a 2006), específico de SmackDown. En esta ocasión, parece que Vince McMahon no quiere mostrar una confianza tan rotunda, al menos de momento, en ninguna de las dos facciones.