Australia ya había tenido una fuerte influencia en el mundo del rugby. En 1987 fue subsede y compartió la organización de la primera copa junto a Nueva Zelanda, mientras que en 1991 y en 1999 se coronó campeón. Con estos pergaminos, tuvo a cargo en soledad la 5ª edición del principal certamen del Rugby Mundial.
Este fue el mundial en el que se registró el primer triunfo de un seleccionado del Hemisferio Norte: Inglaterra, de la mano del genial Jonny Wilkinson, superó a los locales en tiempo suplementario por 20-17 y le dio el primer título el equipo de la rosa.
Australia 2003 registró la mayor concurrencia a los estadios, ya que cerca de 2 millones de espectadores colmaron los 48 partidos y más de 3 billones de televidentes siguieron las acciones en 140 países, superando a Gales 1999.
Por primera vez Los Pumas clasificaron directamente, por haber llegado a los cuartos de final de 1999, y entre los clasificados Georgia fue el único cambio con respecto a España. Además, por primera vez se utilizó un sistema diferente de puntuación: además de otorgarle 4 puntos al ganador se comenzó a utilizar el punto bonus, por marcar 4 tries o perder por 7 o menos puntos.
LAS FIGURAS
El párrafo aparte fue para Jonny Wilkinson, que llegó a Australia con el compromiso de ser el gran protagonista... y vaya si lo fue. El apertura inglés fue la gran figura del campeón, no sólo porque marcó el drop del triunfo en el tiempo suplementario de la final, sino porque fue el goleador del mundial, con 113 puntos. Certero y eficaz, fue el definidor implacable de todo el juego que generaba un equipo inglés que se destacó por el poderío de su pack.
Con un plantel experimentado y de enorme calidad, Inglaterra contó con importantes jugadores como su capitán, Martin Johnson y forwards de renombre como Martin Corry, Phil Vickery, Lawrence Dallaglio, Richard Hill, Neil Back y Jason Leonard. Y entre los backs, Ben Cohen marcaba un estilo, mientras que Mike Tindall, Jason Robinson, Will Greenwood y Josh Lewsey conformaban una línea de tres cuartos con poder de definición.
LA SORPRESA Y LA DECEPCIÓN
Sin dudas la eliminación de Los Pumas a manos de Irlanda en la etapa clasificatoria fue una de las decepciones del torneo. A pesar de que el resultado fue un exiguo 16-15, las expectativas argentinas estaban centradas en ganar ese partido. Fue la revancha de Gales 1999, cuando Los Pumas habían dejado a los irlandeses afuera de los cuartos de final.
Fue el final de la ilusión y el cierre de la carrera de varios históricos como Rolando Martin, Santiago Phelan, Pedro Sporleder, Mauricio Reggiardo, Federico Méndez y Roberto Grau.
EL MEJOR PARTIDO
Por emoción y porque se trató del encuentro final, Inglaterra- Australia fue el partido más emocionante del torneo. Cambiante y parejo, el choque se definió en tiempo suplementario - fue la segunda definición en esa instancia luego de Sudáfrica 1995-. El drop de Jonny Wilkinson marcó el 20-17 que le dio el primer título a Inglaterra.
MAS DATOS CURIOSOS
Por segunda vez en la historia, Argentina abrió el torneo enfrentando al país organizador. Como en Gales 1999, Los Pumas cayeron en el debut, en este caso frente al seleccionado australiano, por 24-8.
El Telstra Stadium de Sídney que albergó la final entre los locales e Inglaterra marcó el récord de público para los mundiales de rugby: asistieron al estadio 82.957 personas.
Un árbitro argentino, Pablo Deluca, dirigió el primer partido de Inglaterra en el mundial: el futuro campeón le marcó 12 tries a Georgia y lo goleó por 84-6.
Deportivamente hubo una diferencia muy pronunciada entre las naciones de primer nivel y el resto. Una muestra de ello es que hubo 10 partidos con resultados que tuvieron más de 50 puntos de diferencia, dos o tres veces más que en los mundiales anteriores. Tal es así, que en la goleada de Australia ante Namibia, por 142-0, Matt Rogers anotó 42 puntos para el equipo local.