Con la llegada de Randal Kolo Muani, desde el Eintracht Frankfurt y por 95 millones de euros, muchos pensaron que el Paris Saint-Germain ya había dado por cerrado el mercado de fichajes de verano. La continuidad de Kylian Mbappé, que sonó hasta el final en el Real Madrid, también estaba asegurada. Sin embargo, en el PSG estaban guardando para el sábado un último movimiento en la ventana de pases. Se trata del neerlandés Georginio Wijnaldum, que fue vendido al Al Ettifaq de Arabia Saudita por 10 millones de euros.
Wijnaldum, que la pasada temporada había estado prestado en AS Roma, componía la lista de los ‘indeseables’ del PSG junto a Navas, Paredes, Draxler, Abdou Diallo, Colin Dagba, entre otros. Finalmente, el PSG se deshizo del volante y ganó margen respecto al ‘Fair Play’ Financiero.