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La última bala
De momento, Alianza Lima se ubica en el tercer lugar del Torneo Clausura con 34 puntos por debajo de Universitario de Deportes (36) y FBC Melgar (35), y por encima de Sporting Cristal (33); por tanto, para ganar el Torneo Clausura y ser tricampeón automático, necesita ganar ante Deportivo Garcilaso, que los ‘cremas’ pierdan ante Sport Huancayo en el estadio Monumental y que los ‘rojinegros’ empaten o pierdan ante Binacional en Juliaca.
Si bien las chances son remotas, matemáticamente es posible y solo por esa razón, Mauricio Larriera deberá colocar a sus hombres de confianza y habitual titularidad para jugarse la última carta ante Deportivo Garcilaso. Al ser partidos en simultáneo, no convocar a los habituales inicialistas para el duelo en el Cusco podría ser una pérdida de oportunidad inmejorable en caso sus rivales jueguen en su favor.
Asimismo, al ser una plaza que implica esfuerzo físico por jugarse en altura, lo más conveniente sería arrancar con el equipo titular que ha venido disputando el Torneo Clausura y, de acuerdo a cómo se vayan moviendo los contextos en las otras canchas, evaluar si ir sustituyéndolos, “guardar piernas” y no arriesgarlos a lesiones de cara a las eventuales finales que se jugarían en la primera semana de noviembre. Dicha decisión sería más certera que la opción de dejarlos en Lima o no arrancar con ellos y dar por perdida la última esperanza latente para los íntimos.
Ausencias clave
Sin embargo, hay un nombre en particular que sí debería ser cuidado de cara al duelo ante Deportivo Garcilaso y que, muy probablemente, no sea desde la partida: Jesús Castillo. El mediocampista titular y pieza clave en el equipo de Mauricio Larriera se encuentra en capilla. Es decir, si recibe una tarjeta amarilla en el duelo ante Deportivo Garcilaso, se perdería la primera eventual final por acumulación de amonestaciones, pues, según el reglamento de la Liga 1 Betsson 2023, esta suspensión aplica para playoffs.
Asimismo, un cambio obligado en la defensa de Larriera es el del lateral derecho Gino Peruzzi tras quedar suspendido por tarjetas amarillas en el partido ante ADT. De esta manera, su reemplazante natural es Edinson Chávez; sin embargo, el futbolista no ha gozado de continuidad incluso cuando Peruzzi presentó un tiempo prologando de lesión. Como se recuerda, otras de las variantes utilizadas en el puesto fueron Aldair Rodríguez, Yordi Vílchez o Franco Zanelatto.
Sin embargo, Zanelatto y Zambrano continúan recuperándose de sus respectivos desgarros y están casi descartados para el duelo de este domingo y el equipo, más allá de pensar o no en las finales, no podrá contar con la base titular debido a estas tres sensibles bajas. Aunque con la buena noticia de que Pablo Sabbag, quien ya recibió el alta médica, podrá ser convocado ante Deportivo Garcilaso y eso implica ser una opción de recambio puesto por puesto para Hernán Barcos que, idealmente, se daría hacia el segundo tiempo del compromiso en caso Larriera opte por colocarlo desde el arranque.
En tal sentido, el once con el que podría contar el estratega uruguayo para este domingo pensando en ganar el compromiso y jugarse su última carta sería con Campos; Chávez, Míguez, Vílchez, Lagos; Ballón, Concha, Cueva; Rodríguez, Reyna y Barcos. Esta semana iniciaron entrenamientos y se definirá si, finalmente, optará por no guardarse nada o colocar a habituales suplentes.
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