El expresidente del Barcelona Josep Maria Bartomeu, uno de los siete precandidatos a la presidencia del club, ha asegurado que el también expresidente Joan Laporta no le marca la agenda, pero le ha recomendado que pare de acusar al club, porque "el Barça no está acusado de corrupción".
En una entrevista con EFE, Bartomeu ha querido mantener distancias con Laporta y ha asegurado que no piensa contestar a muchas de las cosas que dice, con una excepción. "El otro día dijo que el Barça está acusado de corrupción y no es cierto. Que me critique a mí, mira, yo soy una persona física, pero que critique al Barça, no se lo tolero, eso es intolerable", ha indicado.
"El club tiene una acusación por un tema de interpretación fiscal (el caso Neymar), por unas retenciones que hizo el Barça bien o mal, pero eso no es corrupción", ha insistido.
Considera Bartomeu que con esa acusación "Laporta hace daño al Barça". "En eso me encontrará. Para de acusar al Barça, el Barça no esta acusado de corrupción, para", ha insistido.
El último presidente azulgrana no cree que Sandro Rosell tenga que posicionarse públicamente a su favor y asegura desconocer si le ha avalado con su firma -se necesitan 2.534 para pasar el corte-.
"¿Si Sandro me ha dado su firma? No lo sé, no sé ni cuántas tenemos. Durante este tiempo como presidente -desde enero de 2014- a todos los expresidentes los he tratado igual, de la misma manera", ha dicho.
Preguntado si se sentiría incómodo con el apoyo público de Rosell, no ha sido explicito: "Me encantaría que todos los expresidentes dijeran que Bartomeu es el mejor, pero entiendo que no lo hagan".
Apuesta por la neutralidad de expresidentes y exjugadores. "Está bien que no se decanten por ninguno de los candidatos, si se mantienen neutrales es lo mejor para todos. Soy un presidente que intento no hacer bandos, no quiero bandos, cero bandos. Los jugadores emblemáticos también son un activo del club y tendrían que mantenerse neutrales", ha asegurado.
También ha hablado sobre el polémico patrocinio de Catar, un acuerdo que reúne el desacuerdo de prácticamente todos los precandidatos menos Bartomeu.
"Establecer una asociación entre Rosell-Catar, Faus-Catar o Barça-Catar, es una asociación de ideas errónea y quien la haga en serio puede tener una demanda de algunas de las personas", ha advertido.
Ha comentado Bartomeu que además de la posibilidad de cerrar un acuerdo anual con Qatar Airways por la camiseta de juego (60 millones), existen otra serie de negociaciones.
"Qatar Airways es una de las que se han acabado de hablar y es una buena propuesta, económicamente importante. Queremos llegar al nivel del United (64 millones de euros) y tenemos que ir por esta línea o más, porque en la actualidad tenemos una posición de liderazgo en el mundo del fútbol", ha insistido.
Otra cuestión es el patrocinio de la camiseta de entrenamiento. "Por ella podemos conseguir una cifra elevada. Es posible que en la próxima asamblea de compromisarios se presente a los socios el patrocinio de dos marcas: para la competición y para el entrenamiento", ha insistido.
Bartomeu se ha referido al gran salto económico que ha dado la entidad: "Hace poco abrimos una oficina en Hong Kong y este año ya ha facturado 10 millones de euros. Este otoño abriremos una oficina comercial y de expansión en Nueva York, puede ser que en un año se abra una oficina en China. Somos un club global, el número uno en ingresos del mundo con casi 600 millones de euros", ha indicado.
Bartomeu ha dicho que, aunque el Barça es el club con más valor, queda "mucho camino" por recorrer en márketing y patrocinio.
"Nuestro contrato con Nike vence dentro de tres años y somos el último gran club en renegociarlo. Ahora cobramos sobre los 55 millones de euros anuales y el United, 94 millones", ha indicado.
Bartomeu no ha encargado aún ninguna encuesta -"La haremos a finales de la semana que viene, si somos candidatos"-, y dice que "por el bien del Barça" es importante que al final lleguen "cuantos más candidatos mejor".
"Si hay debate y con ello se enriquece el barcelonismo, eso es positivo. Todo lo que sea hablar del Barça en tono positivo, perfecto. Lo que no me gusta es una campaña de críticas hacia los contrarios, todo eso lo quiero evitar", ha comentado Bartomeu, que no tendría dudas de integrar el voto electrónico en el futuro.
Ha recordado que fue él quien convocó las elecciones a la presidencia y que lo hizo en el peor momento, en enero de 2015 tras una derrota en Anoeta y después de la destitución de Andoni Zubizarreta.
"El tiempo me ha dado la razón. Aquella decisión iba entonces en mi contra, porque mi idea era acabar el mandato hasta 2016, pero pensamos en que era el momento de adelantarlas para darle tranquilidad al equipo. Pensamos más en el club que en nuestro interés personal", ha comentado.
Si hubiera habido elecciones el verano pasado, "las hubiéramos ganado con la gorra", ha dicho.
"Trajimos entonces a Luis Enrique y a nueve jugadores, nuevas ilusiones, pero pensé que no tenía sentido convocar elecciones. Cuando tomo decisiones siempre lo hago pensando en el club, no pensando en mí. Siempre lo he hecho así, si no lo hubiera hecho el verano pasado", ha asegurado.
Lo que guarda con celo son sus conversaciones con los jugadores y los técnicos tras aquella derrota en Anoeta. Desde entonces, el Barça puso la directa y consiguió el triplete por segunda vez, convirtiéndose en el primer equipo del mundo que lo consigue.
"¿Si hable con Messi tras aquella derrota? Hablo con todos ellos, les aporto mi visión y mi conocimiento en el mundo de la organización y de las relaciones humanas para intentar que todo eso mejore", ha dicho.
Cuenta que el vestuario del Barça es "una piña" y recuerda que nunca ha visto un grupo humano tan unido. "En algo pequeño habré contribuido, pero también otros muchos. Ahora el equipo es una piña y si lo mantenemos así, en los próximos tres o cuatro años lo podemos ganar todo", aventura.