Flat white: ¿qué es, cómo se prepara (receta) y diferencias con el Latte o Cappuccino?

En el vasto universo del café, existen especialidades que logran capturar la esencia de los granos de café, mezclándolos con la textura sedosa de la leche para crear experiencias únicas para el paladar. Entre estas joyas de la cultura cafetera se encuentra el Flat White, un café que, aunque relativamente nuevo en la escena internacional, ha conquistado los corazones de los aficionados por su balance perfecto y sofisticado resultado. Dicho esto, en la siguiente nota descubriremos qué es el Flat White, cómo prepararlo con una receta sencilla y qué lo distingue de otras bebidas como el Latte y el Cappuccino.

¿Qué es el ‘Flat white’?

El Flat White es un café espresso con leche originario de Australia o Nueva Zelanda, dependiendo de a quién le preguntes. Nació en la década de 1980, y su característica principal es la proporción y tratamiento de la leche, la cual se vaporiza hasta obtener una textura cremosa, pero sin la espuma voluminosa que caracteriza a otras preparaciones como el cappuccino. La idea es crear una bebida que resalte el sabor rico y robusto del espresso, complementado armoniosamente con la suavidad de la leche.

Características del Flat white

• Sabor: principalmente de café, con matices dulces y cremosos provenientes de la leche.
• Textura: sedosa, sin una capa de espuma densa.
• Tamaño: se sirve en una taza pequeña, usualmente de alrededor de 150 ml.
• Temperatura: se recomienda una temperatura ideal de entre 60°C y 65°C

¿Cómo preparar un Flat white?

El Flat White es una opción exquisita para aquellos que buscan un equilibrio perfecto entre la intensidad del café y la suavidad de la leche, sin el predominio de la espuma. Prueba esta receta en casa y sumérgete en la cultura cafetera que este singular brebaje representa. Con su popularidad en aumento, el Flat White no solo es un testimonio del amor global por el café, sino también de la constante innovación en cómo lo disfrutamos.

Ingredientes

• 18-20 gramos de café (para un doble shot de espresso)
• 150-200 ml de leche entera (la cantidad varía según la preferencia personal)

Preparación

• Prepara el espresso: comienza moliendo unos 18-20 gramos de tu café favorito hasta alcanzar una textura fina. Luego, tampa el café en el portafiltro de tu máquina de espresso y extrae dos shots (aproximadamente 60 ml) de espresso directamente en una taza precalentada.
• Vaporiza la leche: mientras tanto, vierte la leche entera en un jarro para vaporizar. Introduce la varilla de vapor en la leche, justo por debajo de la superficie, para evitar crear demasiada espuma. Vaporiza la leche hasta que alcance una temperatura de 65-68°C, buscando una textura suave y cremosa.
• Combina y sirve: vierte lentamente la leche vaporizada sobre el espresso, permitiendo que una pequeña cantidad de microespuma se asiente en la parte superior. El objetivo es lograr una capa muy sutil de espuma, lo que diferencia al Flat White de otras bebidas a base de espresso.

Flat white vs. Latte vs. Cappuccino: diferencias

Aunque el Flat White, el Latte y el Cappuccino comparten ingredientes básicos (espresso y leche vaporizada), las diferencias radican principalmente en las proporciones y texturas de estos componentes.

Flat white vs. Latte

• El Latte tiene una mayor proporción de leche, lo que resulta en una bebida más ligera respecto al sabor del café. La textura de la leche es similar, pero en el Latte se permite una capa más espesa de espuma en la parte superior.

Flat white vs. Cappuccino

• La principal diferencia viene en la textura de la leche. El Cappuccino se caracteriza por tener una tercera parte de espresso, una tercera parte de leche vaporizada, y una tercera parte de espuma de leche, lo que lo hace mucho más aireado en comparación con el Flat White.

¿Qué es un Google Doodle?

El concepto de Google Doodle se originó en 1998 cuando Larry Page y Sergey Brin, los cofundadores de Google, decidieron jugar con el logo de la empresa para asistir al festival Burning Man. Modificaron el logo de Google para dejar un mensaje cómico a sus usuarios, indicando que los fundadores estaban “fuera de la oficina”. Este primer doodle fue relativamente simple, pero estableció un precedente para futuras modificaciones del logo por motivos especiales.

Con el paso de los años, los Google Doodles se han transformado de simples imágenes estáticas a complejas ilustraciones interactivas, juegos y hasta cortometrajes animados. Estos cambios reflejan no solo mejoras en la tecnología web, sino también el deseo de Google de involucrar a sus usuarios de formas cada vez más creativas y educativas.

Tipos de Google Doodles

Los Google Doodles han evolucionado en tipos y complejidad a lo largo de los años. Algunas categorías incluyen:

• Estáticos: son imágenes que reemplazan el logo de Google sin interactividad.
• Animados: introducen elementos animados o vídeos cortos.
• Interactivos: permiten al usuario interactuar con el doodle, como jugar un mini juego o participar en una actividad educativa.
• Globales y locales: mientras algunos doodles son mostrados a nivel mundial, otros están diseñados para celebrar eventos específicos de una región o país.

¿Para qué sirven los Google Doodles?

Los Google Doodles no solo sirven como una fuente de entretenimiento e información, sino que también han demostrado tener un impacto significativo en la visibilidad y el reconocimiento de figuras y eventos históricos menos conocidos. Algunos doodles han llevado a aumentos significativos en la búsqueda y el interés público por personas y eventos destacados, contribuyendo a una mayor apreciación y conciencia cultural.

Asimismo, han despertado un gran interés en la comunidad educativa, siendo utilizados por educadores como herramientas para involucrar a los estudiantes en temas de historia, ciencia, y cultura de una manera divertida y accesible.