Joe Philbin inició la temporada 2015 como coach de Miami, pero después de acumular una marca de 1-3, fue reemplazado por el interino Dan Campbell, quien no mejoró la situación, y los Delfines terminaron con récord de 6-10, para quedarse fuera de playoff s por séptima campaña consecutiva. Para salir de la mediocridad a corto plazo, el equipo de La Florida ha confiado en Adam Gase como coach, una de las jóvenes mentes maestras en la NFL (tiene 38 años), y quien ha ayudado a mariscales de campo como Tim Tebow, Peyton Manning y Jay Cutler.
Su primera misión será llevar al siguiente nivel al QB Ryan Tannehill, el más constante en el equipo desde Dan Marino, pero quien aún no está a la altura de su millonario contrato. El pasador tuvo números similares a los de 2014, (4,208 yardas, 24 TD´s y 12 intercepciones), pero la ofensiva cayó de la 14 de la Liga a la 26 en yardas, por lo que debe ser más consistente, aunque también necesita ayuda de su línea ofensiva, que permitió 45 capturas.
Para restarle presión ya no tendrá como corredor a Lamar Miller, quien se fue a Houston, y aunque Gase intentó reclutar a C.J. Anderson, los Broncos de Denver igualaron la oferta para mantenerlo en la escuadra. Por el puesto titular pelearán Arian Foster, quien solo participó en cuatro partidos con los Texanos en 2015, y Jay Ajayi, que tuvo 187 yardas en su temporada de novato.
En los receptores, Tannehill tiene una estrella en Jarvis Landry, quien registró 1,157 yardas, 110 recepciones y cuatro para anotación, lo que le valió la nominación al Pro Bowl; Kenny Stills no brilló en su primera temporada, pero podría aprovechar la ofensiva abierta de Gase; DeVante Parker y Jordan Cameron también son amenazas. En la línea, Branden Albert y Mike Pouncey fueron al Pro Bowl, y los Delfines consiguieron a uno de los mayores talentos del Draft, Laremy Tunsil, cuya valoración bajó tras un par de incidentes en redes sociales; el objetivo es darle más tiempo al quarterback para explotar rutas largas.
A la defensiva, hay más dudas que certezas. Ndamukong Suh no estuvo a la altura de su contrato y solo registró seis capturas y 61 tacleadas, perdieron a Olivier Vernon que se fue a los Gigantes, y su reemplazo, Mario Williams está a la baja. La estrella es Cameron Wake, quien estuvo ausente más de la mitad de la temporada.
Entre los linebackers llegó Kiko Alonso, tras un año para el olvido en Filadelfi a, en el que no tuvo capturas, mientras que Jelani Jenkins se perdió tres partidos en 2015. En la secundaria Brent Grimes, quien fue nombrado al Pro Bowl, se fue a Tampa Bay, lo reemplazará Byron Maxwell, otro ex de Filadelfi a que tuvo una mala temporada, del otro lado el novato Xavien Howard y Tony Lippett compiten por ser titulares. En los safeties, Reshad Jones es uno de los mejores en su posición, pero hay dudas sobre Isa Abdul-Quddus, quien recibió un gran contrato, a pesar de tener dos intercepciones en cinco años en la NFL.
Tannehill puede volver a ser el del 2014, pero hay muchos pendientes a la defensiva, por lo que será otro año sin playoffs.