Este año, con seis clasificados, se ha alcanzado un récord en la cantidad de peruanos que competirán los Juegos Paralímpicos. La delegación, compuesta por el ciclista Israel Hilario y los atletas Efraín Sotacuro, Yeny Vargas, José Luis Casas, Carlos Felipa y Luis Sandoval, demuestra un alto nivel competitivo, pero también, múltiples ejemplos de coraje.
Es el caso de José Luis Casas, un capitán EP que perdió la pierna izquierda en el 2012, tras enfrentarse a terroristas en la sonada Operación Libertad. Tras un largo proceso de recuperación, con ayuda de una prótesis, pudo volver a caminar, y después, a correr. Recientemente, ganó el oro en 100 y 200 metros en un Open en Ecuador, y nos representará en los Juegos Paralímpicos en Río en los 200 y 400 metros en la categoría T44. “Siempre fui deportista, ¿por qué dejarlo, sobre todo si se puede inspirar a otros?”, sostiene Casas, quien el 2015 cofundó Sin Límites, una asociación que forma deportistas con discapacidad de alta competencia.
Como él, ejemplo de superación es Yeny Vargas, una joven cuyo talento fue descubierto en una Sub 21 organizada por la Federación Deportiva Nacional de Personas con Discapacidad Física (FEDENADIF) el año pasado, y quien dejó atrás a su familia en Arequipa para dedicarse de lleno al atletismo. Sus esfuerzos cosecharon frutos, y se ha convertido en la primera mujer peruana en correr los 200 y 400 metros en unos Juegos Paralímpicos. “Estoy viviendo mi sueño. Estoy feliz, pero también satisfecha, porque me ha costado mucho”, revela.
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