La asunción de Donald Trump como presidente de Estados Unidos genera incertidumbres sobre las políticas que implementará durante su mandato. Entre las propuestas más controvertidas se encuentran las regulaciones destinadas a restringir la inmigración y el aumento de aranceles a productos importados. Estas acciones han provocado un amplio debate acerca de sus posibles efectos en la economía y la estructura social del país.
Una nueva inquietud ha emergido respecto a los cheques de estímulo, en particular sobre los pagos del Dividendo del Fondo Permanente (PFD, por sus siglas en inglés), que impactan a millones de ciudadanos en Estados Unidos. A continuación, más información al respecto.
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¿Trump pagará de otro cheque de estímulo en EE.UU. en su nuevo gobierno?
La incertidumbre persiste entre los ciudadanos respecto a la posibilidad de que Donald Trump emita un nuevo cheque de estímulo tras asumir nuevamente la presidencia. Los más optimistas recuerdan los dos bonos entregados durante su primer mandato, en medio de la crisis provocada por la pandemia.
En ese periodo, el gobierno federal implementó estas ayudas para sostener a la población afectada por la pérdida masiva de empleos, que elevó la tasa de desempleo a casi el 15%.
Trump firmó dos proyectos de ley que permitieron el envío de cheques a millones de hogares elegibles, mientras que su sucesor, Joe Biden, aprobó un tercer bono durante su gestión. Sin embargo, los analistas son escépticos sobre la posibilidad de un nuevo cheque de estímulo bajo un futuro mandato de Trump.
Esto dicen los economistas sobre la posibilidad de un nuevo cheque de estímulo en el 2025
Jacob Channel, economista de LendingTree, explicó a CBS que estos incentivos suelen ser necesarios solo en situaciones económicas críticas, donde los consumidores requieren un impulso para reactivar el gasto.
A pesar de que muchos estadounidenses perciben negativamente la situación económica, los expertos destacan que la economía se encuentra en un estado relativamente saludable, con un crecimiento del PIB robusto, una inflación cercana al objetivo del 2% establecido por la Reserva Federal y una tasa de desempleo del 4,1%, la más baja en cinco décadas.
Channel subrayó que, a pesar de algunas preocupaciones y percepciones negativas, el gasto del consumidor sigue siendo fuerte.
En otro momento, el experto señaló que el republicano no tiene la facultad de enviar un cheque de estímulo de manera unilateral. Para que se realice otro pago, es imprescindible que el Congreso apruebe una legislación que lo autorice. En la actualidad, esta cuestión no está en la agenda legislativa, lo que hace poco probable la entrega de un nuevo incentivo económico a millones de ciudadanos estadounidenses en el corto plazo.