En la intimidad de su casa de Barra de Tijuca, el capitán de la selección peruana recibe a Somos junto con su madre, Petronila Gonzales Ganoza, mejor conocida como Doña Peta. Ambos han grabado escenas para la película sobre la vida del futbolista. Pero un proyecto mayor le preocupa ahora: avanzar en las eliminatorias.
El gran sueño de Paolo Guerrero era el de jugar un mundial con la camiseta peruana y dijiste que Rusia 2018 era tu última oportunidad para concretarlo. ¿Qué va a pasar ahora?
Paolo: Bueno, estamos haciendo todo lo posible, combatiendo contra todo. Sabemos que el camino es difícil, pero nada es imposible. Y ese es el sueño que tengo todos los días.
Has dicho: “Si el Perú tiene todo, si hay talento, no sé por qué pasamos por todo esto”. ¿Hallaste ya una respuesta?
Paolo: Creo que el fútbol peruano bajó mucho el nivel en estos últimos años. Veo que calidad hay, talento también, pero existe algo mental que todavía no nos permite ser fuertes. Yo he vivido en Alemania, por ejemplo, y el alemán no es un deportista talentoso ni con mucha calidad, pero tiene una mentalidad muy fuerte y por eso sobresale bastante.
Doña Peta: Ahora, no solo se trata de mentalidad fuerte, sino de mentalidad ganadora. En el Perú somos conformistas. Paolo quiere ganar, ganar o ganar. Pero lo califican por eso como si fuera un picón...
¿Te molesta que te digan picón, Paolo?
Paolo: No, porque siempre he sido así. La gente reniega a veces porque puedo tener una reacción fuerte cuando estamos con el marcador en contra y las cosas no están saliendo como uno quiere. Trato de controlarme, pero en el momento la furia que tengo de no estar ganando, la frustración… son tantas cosas que te pasan en el momento, que bueno…
Si miramos los resultados de la selección, imagino que te sentirás muy frustrado.
Paolo: Sí, claro, más aún con la camiseta del Perú, con la que quiero siempre ganar. Yo quiero que a mi país comiencen a verlo de diferente forma a nivel futbolístico. Acá, por ejemplo, me dicen: ‘Ah, Perú es fraco’ [‘débil’ en portugués]. Los alemanes también me vacilaban….
Doña Peta: Y él peleaba con los alemanes, peleaba, es muy nacionalista, ah…
¿En serio?
Paolo: Sí, sí, sí. Hay gente, por ejemplo, que dice: ‘En Perú no hay nada que hacer’. Gente que no sabe…
Y tú les dices: “Un momentito, compadre…”
Paolo: Exacto. O algo peor... [ríe] Hasta el día de hoy yo veo eso, pero no se meten así con los argentinos, no los vacilan ni los molestan de esa manera. Entonces, tenemos que darle otra cara al Perú.
Ya, ¿pero cómo lo hacemos? Han desfilado un sinfín de entrenadores en las últimas tres décadas y nada.
Doña Peta: Lo que te digo: cambiarles la mentalidad.
¿Cómo?
Doña Peta: Carajearlos, lo que falta es carajearlos. No los carajean. A mis nietos, por ejemplo, yo los carajeo. A veces vienen y me dicen: “No puedo, Peta…”. Y yo les respondo: ‘Carajo, ¿qué te pasa? ¿No tienes tu mano, tu cabeza?’.
Paolo: No es por comparar, pero yo he jugado con uruguayos y dicen que desde chiquitos sus papás les dicen: ‘Rómpele la pata’. Entonces, ya te imaginas, niños de 8 años a los que les meten esa idea en la cabeza. Puede ser polémico, pero mira cómo juegan hoy. Entran a la cancha y te quieren matar. Entonces, yo creo que es un tema que tienes que inculcar desde niño y eso es tarea de los padres.
La entrevista completa mañana en Somos.