El dinero no compra la felicidad, pero en esta temporada sí ayudó a conseguir el pase a los playoffs. Ahora no hubo historias de equipos cenicientas que con una nómina modesta se metieron entre los grandes monstruos ricos para ganarles jugando un beisbol con todos los antídotos para acabarlos, ahora lo que se invirtió sí se tradujo en triunfos.
Dodgers volvió a tener la nómina más alta de Grandes Ligas y eso se tradujo en el cuarto título divisional, aunque no fue la mejor novena de la Nacional, eso quedó en los Cachorros de Chicago, quienes tuvieron la quinta mayor nómina.
En la Liga Americana el líder fue Texas, quien ocupó el octavo peldaño en ese listado, teniendo a Boston como el que más abrió la cartera para avanzar y lo consiguió, teniendo solo a Yanquis y Dodgers arriba de ellos.
El único club que puede hacer más con menos y volver a poner en ridículo a los que gastan (o invierten) es Cleveland, que desde el sitio 23 (con una nómina de 113 millones de dólares) ganó la División Central y está en la Ronda Divisional.
