Ser un ejemplo para las futuras generaciones de luchadores es el legado que el Hechicero quiere dejar como luchador, así lo asegura en charla con La Afición.
"Que vengan generaciones atrás de mi y que digan 'no lo hago por ego sino porque lo amo y lo disfruto'. Considero que todo profesional cuando hace algo porque lo ama es una bendición y la manera en la que podemos retribuir es ser un ejemplo para los que vienen atrás, dejar algo positivo con nuestro trabajo", afirma.
Dentro de sus objetivos se encuentra ser protagonista de un Aniversario de la Lucha Libre o bien, un Homenaje a Dos Leyendas, por lo que mantiene constancia para hacer crecer su carrera y pronto estelarizar un magno evento.
"Estoy buscando luchas y eventos que consoliden mi carrera. Yo me tardé 13 años en salir de Monterrey y llevo dos años y medio en el Consejo Mundial de Lucha Libre, entonces no tardé tantos años para venir a dejar de ser un elemento del montón, como le dicen, pero yo quiero posicionar mi nombre a nivel nacional y que mejor que en la Arena México, donde los ojos de todos los luchadores, periodistas y empresas te están viendo".
Hechicero fue invitado a la presentación del documental "A dos de tres caídas", por lo que se dice contento y satisfecho con el adelanto que los productores mostraron en el Salón de los Elefantes de la catedral de la lucha libre.
"La lucha libre permea muchos ámbitos: el cine, el teatro, música y otros deportes. Entonces el que se haga este tipo de documentales, aunque no sea en especifico de la lucha libre sino de la Arena México que es un recinto especialmente para nuestro deporte, creo que refleja lo grande que es la lucha libre y seguro que es el primer documental porque da material para mucho más.
"Como comentaron los productores, se puede hacer un trabajo exclusivamente de las máscaras caídas en la Arena México, o de la lucha femenil, de la lucha de chaparritos, los minis; pero creo que para ser el tema principal, el enfoque estuvo muy bien", reflexiona.
Hechicero niega haber visto el producto final del documental, sin embargo analiza que la Arena México y la lucha libre "son un reflejo de nuestra sociedad".
"La Arena México da para mucho más, es parte de nuestra cultura, la lucha libre es parte de nuestra cultura ¿Por qué? porque dentro de ella se emana nuestra historia, encontramos personajes precolombinos, históricos, religiosos, de antitesis, somos un reflejo de nuestra sociedad y lo plasmamos, por eso la gente se identifica tanto con algún luchador", dice.
La importancia de una preparación
Si bien el Hechicero no gusta de hablar de su vida personal, hace una excepción para comentar sobre su preparación en la vida profesional.
"No hablo de mi preparación por ego, sino porque es importante que la gente que ve a la lucha libre como el 'patito feo' de los deportes por algunos elementos 'rústicos' o de una estirpe social baja, que no es ningún pecado ni delito, pero que no tienen la preparación, también hay luchadores que se preparan.
"Hay un compañero que trabaja en la Cámara de Diputados, hay otros que trabajan en un mercado, varios tienen títulos profesionales. La lucha libre permea en todos los estratos sociales", comenta.
El gladiador cuenta con una licenciatura en publicidad y diseño que culminó antes de entrenar como luchador, cursos de marketing con enfoque deportivo y estudia una segunda carrera en Comunicación Empresarial que "espero culminar con satisfacción".
"También, antes de venir a la capital trabajé casi un año en un canal de televisión por internet donde tenía un programa de lucha libre, y dije 'híjole, yo no puedo competir con las grandes televisoras porque ni soy periodista ni soy comunicólogo', yo no tenía tiempo de andar viendo que pasaba en todas las arenas o en todas las empresas, por lo que me empecé a empapar de lo que es la multiculturalidad (sic) de la lucha libre, ahí fue cuando me arraigué y conocí muchos pintores y músicos que se inspiran en la lucha libre", concluye.