Cinco equipos separan a Cruz Azul de Morelia, último en la tabla de cocientes. Como le sucedió hace varios años, La Máquina ha bajado escalones en esta competencia, se ubica en el decimosegundo, aunque por unas jornadas cayó hasta los últimos lugares.
Con este panorama, estos equipos se enfrentarán, y como ingrediente extra están los entrenadores, quienes a través de los años han dado muestras que no tienen mucha empatía. Eso sí, el Ojitos negó que tuviera algún conflicto con Tomás, se le preguntó del tema, porque durante mucho tiempo se ha especulado sobre una mala relación.
Sin embargo, el entrenador del cuadro michoacano dejó claro que no es así, que sí han tenido algunos roces, pero comunes en el futbol. “Perdóname, pero nunca he tenido un pique con Tomás, son cosas que pasan en el campo de juego y después se olvidan”, mencionó Meza. Ambos conjuntos tienen 15 puntos, se encuentran lejos del estándar que quieren manejar en la Liga Mx para acceder a la fi esta grande. De ahí, la importancia del triunfo, que, de paso, le ayudaría a los cementeros a conseguir dos triunfos seguidos, algo que no ha ocurrido en este Apertura 2016.
Su último partido lo ganó con 5-3 al Veracruz. La presión tiene tintes distintos, la de La Máquina se inclina porque le urge una buena cara, tras varios torneos de fracasos, cuatro sin clasificar a la Liguilla. El proyecto de Tomás Boy ha sido bien respaldado, pero a cambio, ya se le piden resultados.
Se contrataron los jugadores que quiso, dejó fuera a otros como Marc Crossas o Francisco Javier Rodríguez, y hasta el momento se ha quedado corto. Además, este torneo se dio aquel episodio contra el América, vergonzoso para los afi cionaos azules, pues de ir ganando 3-0, perdieron al fi nal 4-3.
En fin, detalles que poco a poco han desesperado a los seguidores. El tema de Morelia también es grave. Es el colero en el descenso, y ha perdido sus últimos tres duelos contra Pachuca, Puebla y Chivas. Además, es el equipo más goleado de la Liga con 22 tantos en contra. No cabe duda que el trabajo de Enrique Meza ha tenido un sello especial en el futbol mexicano.
No solo los títulos cuentan en su carrera, sino también el trabajo que ha hecho con equipos que parece, tiene elementos que no tienen un nivel alto y sorprenden, porque juegan a tope. Le pasó con el Toluca, con el que tenía futbolistas no tan jóvenes, otros más que iban en declive, y los hizo campeones. Luego, con Morelia los hizo jugar bien varios partidos, aunque en otros no se le dieron los resultados. En ocasiones, han ido ganando duelos y el rival termina dándole la vuelta.