El jugador argentino Javier Mascherano ha firmado este lunes su renovación con el Barcelona hasta junio de 2019, en un acto protocolario celebrado en las oficinas del club que su compañero Neymar da Silva también vivirá en los próximos días.
El delantero brasileño y el Barça anunciaron el pasado 1 de julio el acuerdo de renovación hasta 2021 y, en principio, el jugador debía rubricar su nuevo contrato antes de viajar a su país para disputar luego los Juegos Olímpicos.
Y, aunque con varios meses de retraso, fuentes del club han asegurado a Efe que la firma es solo cuestión de días.
Hace tres semanas, fue el centrocampista Sergio Busquets quien firmó su renovación hasta 2021, con opción a dos años más en función de los partidos disputados.
Este mediodía lo ha hecho Mascherano hasta 2019, acompañado del presidente del FC Barcelona, Josep Maria Bartomeu, del vicepresidente deportivo, Jordi Mestre, del directivo Javier Bordas y del secretario técnico, Robert Fernández.
Tras las renovaciones de Neymar, Busquets y Mascherano, los próximos en pasar por las oficinas del club para ampliar su vinculación como azulgranas, deberían ser otras dos piezas básicas de la primera plantilla: su gran estrella, Leo Messi, y el capitán del equipo, Andrés Iniesta.
Messi finaliza contrato en 2019 y la intención del Barcelona es ampliarlo antes de que finalice esta campaña.
A Iniesta, que acaba en junio de 2018, cuando ya habrá cumplido los 34 años, se le ofrecerá el último contrato de su carrera para que pueda retirarse en el Barça y desempeñar algún cargo en el club cuando cuelgue las botas.
Otros jugadores que podrían ver mejorados su contratos en los próximos meses son el croata Ivan Rakitic, el uruguayo Luis Suárez y el alemán Marc-André ter Stegen.
Todos ellos finalizan su relación con la entidad catalana el 30 de junio de 2019.
Sin embargo, el buen rendimiento de los dos primeros la temporada pasada y la clara apuesta por el tercero en la portería azulgrana hacen necesaria una actualización de sus fichas que, lógicamente, llevará aparejada un ampliación contractual.
Las negociaciones que se aparcarán hasta final de temporada, por expreso deseo de Luis Enrique Martínez, son las de la renovación del técnico del Barcelona, que finaliza contrato el próximo 30 de junio y que todavía no ha manifestado su intención de continuar dirigiendo al equipo.