El Gran Premio de Francia regresará al calendario de la Fórmula Uno en 2018 después de una ausencia de 10 años.
Christian Estrosi, presidente del concejo regional de la Provenza-Alpes-Costa Azul, informó el lunes que la carrera se hará en el circuito Paul Ricard en el sur de Francia.
El Gran Premio más antiguo del mundo se realizó por primera vez en 1906 pero fue eliminado del calendario en 2008 por cuestiones económicas.
El circuito Paul Ricard, también conocido como Le Castellet, fue sede del Gran Premio de Francia por última vez en 1990. La carrera fue organizada en Magny-Cours de 1991 a 2008.
Estrosi explicó que las autoridades francesas han llegado a un acuerdo por cinco años con los organizadores de la Fórmula Uno. Los términos económicos no fueron revelados.
"El perder el Gran Premio dejó una verdadera cicatriz en nuestro país", declaró Estrosi en el Club del Automóvil de Francia. "Hoy puedo hacer el firme y definitivo anuncio de que el Gran Premio de Francia regresará al circuito Paul Ricard tan pronto como el verano de 2018".
El anuncio se dio pocos días después que el Gran Premio de Alemania fuera eliminado del calendario de 2017.
Estrosi rindió tributo al piloto Jules Bianchi, quien murió el año pasado tras una larga batalla por recuperarse de las serias lesiones en la cabeza que sufrió en el Gran Premio de Japón en octubre de 2014.
"Dedico este gran regreso a mi amigo Jules", indicó Estrosi. "Tengo a su familia en mis oraciones".
Jean Todt, presidente de la Federación Internacional del Automóvil (FIA), dijo que el regreso del Gran Premio de Francia es una "enorme satisfacción" para el organismo.
"Esta es una enorme noticia para Francia y su capacidad para albergar eventos internacionales importantes", subrayó Todt en un mensaje grabado previamente. "Le Castellet ha sido modernizado y cuenta con todas las características que se requieren para organizar este evento".
De acuerdo con Estrosi, los accionistas del circuito han invertido 80 millones de euros (85,6 millones de dólares) desde 2002 para renovar el Paul Ricard, que por lo general es usado por equipos de la Fórmula Uno para sus sesiones de pruebas.