El madrileño Alberto Lora es, a sus 28 años, una de las piezas claves del Real Sporting de Gijón, equipo en el que volvió a jugar un papel estelar la pasada campaña, que acabó con el ascenso del club asturiano a la División de honor del fútbol español.
Uno de los capitanes del equipo que dirige Abelardo, el versátil futbolista de Móstoles comentó en una entrevista con la Agencia EFE, mientras apura el tramo final de sus vacaciones en la capital de España, diversos aspectos relacionados con el retorno a Primera de uno de los 'históricos' del balompié hispano, cuya pretemporada arranca este lunes.
Pregunta: Cuando acabó el partido en el Benito Villamarín les quedaba por delante una promoción en la que podía pasar de todo. Sólo unos minutos después (al empatar el Lugo en Girona), estaban en Primera y de vacaciones. ¿Cómo vivió esos instantes?
Respuesta: Fue una locura. Pensaba que jugaríamos la promoción, que era imposible que el Lugo empatase. Esos minutos fueron muy locos. Estábamos pendientes de la radio. Luego, al verte en Primera y que te quitabas de encima la promoción, fue una alegría tremenda.
P: ¿Fue lo más loco que le ha sucedido desde que es futbolista?
R: Por la manera en la que sucedió, seguramente sí. Porque alegrías había tenido ya algunas en el fútbol. Pero pasar de verte en promoción, a estar en Primera; luego sin saber qué pasaba en Girona, si volvían a jugar o no... fue todo muy loco, sí.
P: La celebración en Gijón tampoco estuvo mal, ¿no?
R: Ya sólo con ver el recibimiento en el aeropuerto, a la vuelta de Sevilla, nos quedamos boquiabiertos. Porque te imaginas que igual podía ir gente, pero de ahí a que el bus no pudiese salir casi de allí... Luego, en Gijón, fue algo increíble. Y al día siguiente, con la recepción en el Ayuntamiento, todo abarrotado; y ver las calles llenas desde el bus descapotable... Eso creo que se me quedará grabado para siempre, el ver a tanta gente tan feliz.
P: ¿A qué altura de la temporada empezaron a creer que podían subir?
R: No me acuerdo exactamente. Pero en mi caso, cuando vi que Las Palmas y Valladolid tenían un bache y que nosotros aguantábamos, empecé a pensar en que pelearíamos la segunda plaza con el Girona.
P: Sea sincero. ¿Creían realmente en la posibilidad del ascenso directo antes del partido contra el Betis?
R: Te quedaba la ilusión de pensar en ello, pero yo pensaba que íbamos al 'play off', porque era difícil que el Girona pinchara. Y, menos aún, en casa.
P: Pues están de nuevo en Primera. Y a nadie le gusta acabar las vacaciones, pero me imagino que así molesta menos volver al trabajo, ¿no?
R: Siempre llega el momento en que tienes ganas de desconectar y, aunque haya sido un año bueno, viene bien irse de vacaciones. Pero al final, siempre tienes ganas de regresar. Y si es para jugar en Primera, más aún, porque vas a volver a jugar contra los mejores.
P: Parece que sigue habiendo problemas y que, como mínimo, el Sporting tendrá limitaciones a la hora de fichar. ¿Le preocupa esto?
R: Es cierto que en Primera va a ser más complicado competir. Pero este equipo tiene una buena base y creo que va a crecer.
Está claro que los refuerzos serán importantes y sé que Nico (Rodríguez, director deportivo) y Abelardo están trabajando en ello. Tendrán que elegir bien, en función de las limitaciones.
P: Usted ya es uno de los 'veteranos' de un equipo plagado de jóvenes que, por otra parte, no parecen arrugarse. ¿Qué perspectivas le ve a este Sporting de los 'wonderguajes' en Primera?
R: Es cierto que somos un equipo muy joven, pero a mí este equipo no me ofrece ninguna duda. En Segunda se demostró que fue un equipo difícil de batir. Los más jóvenes se acoplaron bien. No le tienen miedo a nada. Y estoy convencido de que lo van a hacer de maravilla.
P: ¿Cuáles fueron las claves del éxito el curso pasado?
R: Sobre todo la unión del grupo. Y, luego, el esfuerzo. Sabíamos que sería complicado, pero que si demostrábamos solidez defensiva tendríamos mucho ganado. Además, hay muy buen rollo. Lo hay entre compañeros y también con el cuerpo técnico.
P: ¿Se mantendrá el Sporting en Primera?
R: Estoy convencido de que sí. Vamos a trabajar para ello. Será difícil, pero, al mismo tiempo, es un reto muy ilusionante. Y creo que lo vamos a conseguir.
P. Usted es polivalente, pero juega de lateral derecho. ¿Qué jugador con los que se las tendrá que ver de nuevo le preocupa más?
R: Vamos a jugar contra grandes equipos, como el Madrid, el Barcelona, el Valencia... pero cualquier jugador de los que está en Primera tiene un nivel enorme y serán difíciles de defender todos.
P: Ha estado a las órdenes de dos técnicos que, además de muy queridos por la afición del Sporting, posiblemente, después de Vicente Miera y José Manuel Díaz Novoa, sean los más importantes de la historia del club. Manolo Preciado le hizo debutar en Primera y con Abelardo ascendió este año. ¿Cómo los definiría?
R: Manolo, que en paz descanse, y Abelardo son muy parecidos. Sobre todo en el trato. Son cercanos. Fueron futbolistas y saben cómo piensa el jugador, porque han vivido esa experiencia.
Hablan claro y saben gastar bromas, también, diferenciando en todo momento el trabajo y la diversión. Luego, en lo deportivo son distintos, aunque se parecen en buscar la solidez defensiva.
Manolo llegó en un momento crítico y devolvió la ilusión al sportinguismo. Abelardo, igual. Llegó en un momento muy complicado, creyó en la cantera, apostó por ella y logró un ascenso en el que nadie pensaba.
P: ¿Por qué triunfa Abelardo en el Sporting?
R: Por ser tal y como es. Los que le conocen saben que no actúa, que es así. Es cercano a todos, a los jugadores y al aficionado. A la vez es exigente, pero siempre con buen trato. Es sincero y honesto. Y eso el jugador lo entiende.
En un momento dado, a algún jugador le explicó que tendría a otros por delante, pero que, si trabajaba, no tendría las puertas cerradas. Y así sucedió luego. Hubo gente que no contaba al principio y al final contó mucho. Eso es importante, también.
P: Este lunes arrancan de nuevo ¿Ya tuvo alguna pesadilla con la 'caña' que les va a meter Gerardo (Ruiz, preparador físico)?
R: Bueno, sabemos que las pretemporadas siempre son duras. Y que toca sufrir. Este año, gracias al trabajo que hicimos durante la pretemporada tuvimos una forma física de sobresaliente a lo largo de toda la temporada.
Además, Gerardo te aprieta, pero te hace el trabajo muy ameno. A veces hacemos excursiones y entrenamos fuera de Mareo, para variar. Gerardo tiene muy buen humor, también. Se sufre, pero se disfruta.
Y, además, el futbolista quiere hacer siempre un buen trabajo. Aquí no se 'escaquea' nadie. Todos nos exigimos mucho a nosotros mismos.