Los diestros mexicanos Arturo Saldívar y Sergio Flores, así como el español Paco Ureña, se fueron con las manos vacías de trofeos, durante la corrida 15 de la Temporada Grande 2016-17 en la Monumental Plaza México.
Los tres espadas lidiaron este domingo, ejemplares del hierro de Barralva, los cuales tuvieron una dispareja, pero buena presencia física y un juego bastante aceptable en términos generales.
Abrió la tarde el ibérico Paco Ureña con el toro de su confirmación de nombre "No que no", con 528 kilogramos de peso, y con el que brindó una labor completa, de mucho talento, empeño y valentía, la cual no pudo redondear al final con el acero.
Ureña mostró gran parte de su quehacer taurino con capa y muleta, en un trasteo medido y bien llevado, ante un toro noble y de buen juego que le permitió lucirse por momentos. Malogró al final con la espada y todo quedó en ovaciones.
Con su segundo toro, el ibérico volvió a lucir con otro trasteo medido y templado, sin embargo, ahora el burel se negó a ayudarlo, de ahí que sus intentos se perdieron en la indiferencia del público. Al final batalló con la espada y se fue entre división de opiniones.
En tanto, Arturo Saldívar se mostró muy empeñoso y voluntarioso en su lote; sin embargo, los dos rivales en turno permitieron tener una poca trastada a la hora de citarlos, pese a los muchos intentos que tuvo el matador jalisciense.
En su primer turno, Saldívar poco pudo lograr con capa y muleta, de ahí que al final se fue con algunos silbidos de desaprobación, mientras que en su segunda labor pasó sin pena ni gloria para irse en silencio.
Por su parte, el tlaxcalteca Sergio Flores también batalló con dos toros de diferentes estilos y embestidas, y pese a los muchos intentos que hizo por agradar a la concurrencia, de poco sirvieron, ante dos enemigos de poco juego y emotividad.
En su primera salida Flores se fue enmedio del silencio y cerró la tarde con una
ligera ovación, luego de esfuerzo y empeño que puso sobre el ruedo del coso monumental de Insurgentes.
NTX/OPR/LRB