Raffaella Camet recuerda la era de las 'Matadorcitas' con mucha ilusión. Más que la fama y las entrevistas, el hecho de representar a su país y vestir la casaquilla roja era lo que más les honraba. "Trabajar en silencio y lograr clasificar al Mundial" de Tailandia fue la mejor hazaña que pudieron lograr.
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Los peruanos teníamos las ilusiones y velas encendidas sobre ellas queriendo que aquellas épocas gloriosas de Seúl 88' vuelvan. Sin embargo, el tiempo fue pasando y la brillante generación al mando de Natalia Málaga que consiguió el cuarto puesto en el Mundial de Tailandia, también.
Llegó el 2015 y Raffaella decidió dejar la selección peruana, o mejor dicho, ponerle 'stand by' a esa etapa. "Era difícil cumplir con todo. Yo ya llevaba casi 9 años en selección. Obteníamos las mismas competencias, los mismos puestos. Si bien es cierto íbamos madurando, pero era lo mismo", confesó.
Raffaela Camet no descarta regresar a la selección de mayores. Es algo que quiere completar. De hecho, la llegada de Luizomar De Moura la entusiasma y la sonrisa en su rostro lo reveló. "Como deportista soy ambiciosa y busco seguir mejorando (...) El plan de Luizomar De Moura me entusiasma bastante. Incentiva bastante tener a una persona que es capa en lo que hace, que está totalmente motivada. Me provoca estar en la selección", dijo la capitana de Sporting Cristal.