Entre los 41 países que disputarán los Juegos Panamericanos de Lima 2019 solo hay dos que no han ganado nunca una medalla en la historia de la competición: Aruba e Islas Vírgenes Británicas. La buena noticia es que ambos tiene fundadas esperanzas de estrenarse en la capital peruana.
Aruba, una isla de 180 km cuadrados situada frente a las costas de Venezuela, con una población que ronda los 100.000 habitantes, participa en los Juegos Panamericanos desde 1987, la edición que se disputó en la ciudad estadounidense de Indianápolis. Desde entonces no ha faltado nunca. Acudió en 2015 a Toronto, la última sede, con 25 representantes, que lo intentaron en bolos, ciclismo BMX, natación, natación sincronizada, taekwondo y vela.
Regatismo, la oportunidad de Aruba
Fue precisamente una regatista, Philipine van Aanholt, quien más cerca quedó de subir al podio: a solo un paso, con su cuarta posición en la clase Láser. Van Aanholt había sido la abanderada arubeña en la ceremonia inaugural de los Juegos. Participó en los Juegos Olímpicos de Río, con un puesto vigésimo octavo, y fue quinta en la misma clase Láser en los Juegos Centroamericanos y del Caribe de Barranquilla en 2018, por lo que una vez más será candidata al podio en Lima.
También lo será, entre los veinte componentes del equipo de Aruba, la jugadora de bolos Thashaina Seraus, que ganó el oro en los Centroamericanos y Caribe de Barranquilla y el bronce en los Sudamericanos de Cochabamba. Otra opción es la nadadora artística Kyra Hoevertsz, medallista individual y en duetos en Barranquilla. Atletismo, bolos, ciclismo BMX y ruta, kárate, natación y natación artística, vela, tiro y taekwondo serán las disciplinas con representación arubeña en Lima.
Las Islas Vírgenes y su esperanza en el atletismo
Las Islas Vírgenes Británicas, un archipiélago de cuarenta islas que suman 153 km cuadrados y no reúnen más de 32.000 habitantes, forman parte de los Panamericanos desde la edición de Caracas 1983. Solo participaron con seis deportistas en Toronto 2015, todos ellos en atletismo. Y es precisamente en ese deporte en el que el equipo virgenense puede ganar en Lima su primera medalla. Un candidato más que claro es Kyron McMaster, campeón de la Liga del Diamante 2018 en 400 m vallas y tercero del ránking mundial de la prueba. Hizo su mejor marca, 47.54, en París en junio de 2018.
Su tiempo más rápido de esta temporada fueron los 49 segundos y 12 centésimas que tardó en dar la vuelta al estadio en junio en Oslo. No menos aspirante a medalla es Chantel Malone, que en abril firmó 6,90 en salto de longitud en Atenas. Su progresión es evidente: en los campeonatos del mundo de 2017 fue séptima con 6,57. Fue quinta en los Panamericanos de Toronto 2015 con 6,62. El lanzador de peso Eldred Henry, que en mayo hizo su mejor marca personal con 21,47 m, intentará también pisar ese primer podio para su país.
No todos los participantes de Islas Vírgenes Británicas en Lima pertenecerán esta vez a la disciplina de atletismo. También habrá presencia en natación y Thad Lettsome competirá en vela, en la clase Laser, gracias a una invitación. No se clasificó por puestos, pero los criterios de universalidad de los Juegos facilitaron su admisión. EFE