Considerar imposible cubrir los 42.195 km del Maratón de la Ciudad de México ha quedado en el olvido para Luis Vargas. Junto a unas 30 mil personas, este año se prepara para la edición XL de la carrera de mayor relevancia en el circuito nacional y regional.
Tiene 26 años y apenas hace dos que se adentró en el mundo del running. Todo de forma autodidacta. Lo que comenzó como un pasatiempo, se ha convertido en un estilo de vida en el que Luis ha encontrado motivación, retos y un sitio en el cual sentirse pleno.
“Cuando corro es el único momento en el que me siento realmente bien, genuinamente siento que mi cuerpo y mi mente llegan a un plano en el que no estoy normalmente. Es mi lugar seguro, es el momento que más disfruto”, confesó para MILENIO a sólo unas horas del disparo de salida.
A principios de 2022 salir a correr se volvió un hábito con inesperados efectos en la vida de Luis. No sólo mejoró su estado físico, sino que también le significó una introspección de la que aprendió a conocerse a sí mismo. Tras una ruptura amorosa y el comienzo de un nuevo año, el objetivo quedó definido: completar un maratón.
Meses de preparación le ayudaron a completar sus primeros 42.195 km con una satisfacción que únicamente puede experimentar quien corre, según describe. A partir de ello las carreras se hicieron eventos habituales en el calendario de Luis. Sólo este año ya ha completado circuitos en Acapulco, Guadalajara y en la propia Ciudad de México.
“Cuando terminé el primer maratón fue una sensación de mucha satisfacción porque entrené por mi cuenta, porque me lo propuse tras una ruptura amorosa que de cierta forma también me motivó a centrarme en mí, a pensar en mí”, agregó.
Correr 42 km de forma autodidacta
Con la etiqueta Gold Label Races por la World Athletics (el órgano rector a nivel mundial), el Maratón de la Ciudad de México se ubica dentro de la élite de los eventos de su tipo. En él, cada año acuden miles de competidores de distintas nacionalidades, así como atletas profesionales.
Pese a ello, el único requisito para participar es tener la mayoría de edad y si bien para muchas personas la idea de completar un circuito de 5 km, 10 km, 21 km o un maratón, sin ser un deportista consolidado parece inviable, no lo es (aunque cada proceso varía según las características y condiciones de cada individuo).
Adepto a la actividad física desde temprana edad, en especial al fútbol, la inmersión de Luis en el running fue producto de buscar opciones que le permitieran desarrollarse dentro de una disciplina deportiva. Sin mucho idea del tema, pero con guía y recomendaciones de otros corredores amateurs, comenzó su travesía.
“Me llamó la atención, pero hasta ahí. (...) Cuando empecé a correr me sentí bien raro porque me dolía todo. Yo empecé con 1 km, luego 2.5 km, luego 6 km. Con el paso del tiempo obviamente fui mejorando y corrí mis primeros 10 km que no fue en carrera, sino en entrenamiento”, recordó.
En cuanto a la alimentación —puntualiza— la dieta que sigue tampoco sigue instrucción alguna por parte de un especialista de la salud. No obstante, intenta cuidar lo que come al evitar excesos de grasas o azúcares: “Con el tiempo he aprendido qué le funciona a mi cuerpo y cómo se siente mejor”.
Todavía en un nivel no profesional, Luis es consciente que para dar un paso adelante en su rendimiento debe acercarse a un entrenador físico y a un nutriólogo.
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La satisfacción de correr en conjunto
Para el Maratón de la Ciudad de México 2023 fueron habilitadas 10 categorías: Libre, Máster, Veteranos (del I al VI), personas con discapacidad motriz (sillas de ruedas), y personas con discapacidad visual (ceguera total, parcial o débiles visuales).
En total, se espera una afluencia de alrededor 30 mil corredores con un objetivo en común: cruzar la meta. Y aunque se trata de una carrera con premios que rondan entre los 12 mil y los 550 mil pesos, la esencia del evento está lejos sentirse como una competencia despiadada. Por lo menos en la experiencia de Luis.
“Más allá de la satisfacción personal, el ambiente que vives. (...) Hay mucho apoyo, todos vamos a lo mismo y no importa qué tan rápido. Siento que eso no existe, no eres rápido ni lento, eres corredor. Todos somos iguales en ese momento y vamos hacia el mismo lugar”.
La edición XL se llevará a cabo el domingo 27 de agosto con la línea de salida en la avenida Insurgentes Sur, entre el edificio rectoría de la UNAM y el Estadio Olímpico Universitario (EOU); finalizará en la Plaza de la Constitución, también conocida como la plancha del Zócalo.
LAFC