El presidente de los Toronto Raptors, Masai Ujiri, ha recibido una multa de $25,000 por ingresar a la duela en el descanso del Juego 3 del sábado para confrontar verbalmente a los oficiales del juego, anunció el domingo el presidente de operaciones de liga de la NBA, Byron Spruell.
El incidente aparentemente fue provocado por una llamada que iba en contra de los Raptors hacia el final de la primera mitad en la duela de Cleveland Cavaliers.
Una canasta de Serge Ibaka fue contada originalmente y luego rechazada por los árbitros después de consultar. La llamada condujo a DeMar DeRozan, al entrenador Dwane Casey y sus asistentes a gritar a los oficiales, y Ujiri también se unió.
La reversión fue doblemente dolorosa ya que Kevin Love metió un triple en la siguiente jugada.
Cuando terminó la mitad, un enfurecido Casey, con el saco de traje abierto arrojó su corbata al suelo.
"Pensé que hubo algunas malas llamadas en el tramo que todo fue en contra de nosotros", dijo DeRozan.
El cuarto juego es el lunes por la noche en Cleveland. Toronto, que está detrás de la serie 3-0, necesita una victoria para mantenerse vivo en la semifinal de la Conferencia Este.
Información de The Associated Press se utilizó en este informe.