Con una espectacular segunda mitad de sus jóvenes figuras Jayson Tatum y Jaylen Brown, los Boston Celtics derrotaron este viernes a los Miami Heat por 121 a 108 y redujeron la desventaja a 3-2 en la final de la conferencia Este de la NBA.
Los Heat, que perdieron la primera de sus tres oportunidades para clasificar a la gran final, se fueron al descanso con una ventaja de siete puntos pero al regreso del vestuario se vieron totalmente superados por los Celtics, que no estaban dispuestos a abandonar todavía la sede "burbuja" de Disney World.
"Teníamos que jugar mejor, estábamos luchando por nuestra vida", subrayó el alero Jayson Tatum, la estrella del juego con 31 puntos, 10 rebotes y 6 asistencias.
Estar 3-1 no era divertido pero tenemos que ir un partido a la vez. No podemos pensar en ganar los tres partidos a la vez", Jayson Tatum, jugador de los Boston Celtics.
El alero All-Star estuvo respaldado por Jaylen Brown, con 28 puntos y 8 rebotes, mientras por Miami brillaron el base esloveno Goran Dragic, con 23 puntos, y el escolta Duncan Robinson con 20 unidades y 3 triples.
El novato Tyler Herro, el héroe de los Heat en la victoria del miércoles con 37 puntos, se quedó el viernes con 14 puntos y 2 triples, en una correcta estadística de 6 tiros de 12 intentos.
"Merecieron la victoria, se la ganaron", reconoció el técnico de los Heat, Erick Spoelstra. "Sabemos lo difícil que es ganar en playoffs y no competimos lo suficientemente duro en defensa y pagamos el precio".
Los Heat tendrán una nueva opción de clasificar a la final, que sería la primera desde la marcha de LeBron James en 2014, en el sexto partido que se disputará este domingo en Disney World (Orlando).
La energía que se necesitaba
Con la presión de estar al borde de la eliminación, los Celtics arrancaron el juego con un tremendo desacierto en el tiro, anotando solo un 25% de los lanzamientos de campo en el primer cuarto, su segunda peor marca en toda la temporada.
Tatum falló sus tres lanzamientos en el primer cuarto, recordando la negra primera mitad que jugó en el cuarto partido, en la que dejó su marcador a cero.
Con Tyler Herro de nuevo en el banquillo de inicio, Miami contó con la inspiración de otro excelso tirador, el escolta Duncan Robinson, que anotó 12 puntos con 2 triples solo en el primer cuarto.
Como en el resto de la serie, los Heat hacían un gran trabajo frenando la velocidad de Tatum, Kemba Walker y Jaylen Brown, obligándoles a atacar en estático y a abusar de la jugada individual.
Miami llegó a tener una ventaja de 12 puntos pero los Celtics la redujeron a siete al descanso (58-51). A la vuelta del vestuario, las jóvenes figuras dieron un espectacular giro en el marcador, con Tatum castigando a la defensa de los Heat con 17 puntos solo en el tercer cuarto, el mejor ofensivamente de los Celtics en los playoffs con 41 puntos.
"Simplemente pusimos la energía que se necesitaba para ganar este partido", dijo el base Kemba Walker (15 puntos y 7 asistencias).
Únicamente el base esloveno Goran Dragic conseguía doblegar la resistencia de los Celtics anotando 13 de los 25 puntos de su equipo en el tercer cuarto.
Los Celtics llegaron a ir 14 puntos arriba pero la ventaja se redujo a nueve (92-83) para el comienzo del último cuarto. Miami no pudo, sin embargo, sobreponerse a una noche negra desde la larga distancia, con solo 7 triples de 36 intentos (19,4%) por 12 de 38 (31,6%) de su rival.
Jaylen Brown clavó dos triples consecutivos que pusieron el partido demasiado cuesta arriba para los Heat, que padecieron las discretas actuaciones de sus figuras Jimmy Butler (17 puntos y 8 rebotes) y Bam Adebayo (13 y 8).
La eliminación de Dragic por faltas personales a cuatro minutos del final acabó de decantar la balanza para los Celtics, que sueñan con ser el quinto equipo de la historia en remontar un 3-1 en contra en unas finales de conferencia.
El ganador de esta serie enfrentará en la gran final al vencedor de la conferencia Oeste, donde Los Angeles Lakers dominan por 3-1 frente a los Denver Nuggets. (D)