Mike Brown, de los Sacramento Kings, fue nombrado este miércoles Entrenador del Año de la NBA, tras guiar a los Kings de regreso a los playoffs.
El entrenador recibió 100 de los 100 votos posibles para el primer puesto, un hito en la historia de la premiación.
Brown también ganó el premio en 2009 con los Cleveland Cavaliers, guiando al equipo que ganó 66 juegos en una temporada en la que LeBron James fue nombrado el Jugador Más Valioso de la liga.
Fue despedido por los Cavs un año después, y finalmente aterrizó brevemente en Los Angeles Lakers.
En su primer año al frente de Sacramento, dio la vuelta a una franquicia cuya sequía de playoffs de 17 años fue la más larga en la historia de la NBA y la sequía activa más larga en los principales deportes profesionales de Estados Unidos.
Brown llegó a Sacramento después de seis temporadas como asistente de Steve Kerr con los Golden State Warriors.
"Estos honores no se dan con frecuencia, por lo que lo aprecias mucho", dijo Brown tras ser elegido.
Conocido durante mucho tiempo por priorizar la defensa, Brown convirtió al joven equipo de los Kings en una fuerza ofensiva.
Los Kings lideraron la liga en anotaciones con un promedio de 120,7 puntos por partido en la temporada regular.
Fueron segundos en porcentaje de tiros de campo con 49,4 y terceros en asistencias por partido con 27,3. Su récord de 48-34 es una mejora de 18 juegos con respecto a la temporada pasada.
Ahora los Kings están arriba 2-0 en su serie de playoffs de primera ronda contra los Warriors, campeones reinantes, después de ganar los dos primeros juegos en su estadio.
Brown se llevó el premio por delante del entrenador del Oklahoma City Thunder, Mark Daigneault, quien llevó a su club en reconstrucción a un récord de 40-42 y un lugar en el play-in, y al entrenador de los Boston Celtics, Joe Mazzulla
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