El camino de las Águilas de Filadelfia a su primer trofeo Vince Lombardi no fue sencillo. Después de una decepcionante campaña en 2015 con Chip Kelly como el head coach –seis triunfos y nueve derrotas-, el dueño Jeffrey Lurie decidió darle las gracias al entrenador y, después de un interinato de Pat Shurmur, comenzó una reconstrucción.
El 16 de enero de 2016, los Eagles hicieron su primer gran movimiento al contratar a Doug Pederson. El head coach regresó a Filadelfia tras su paso por el staff (2009 a 2011) y pasó dos años como coordinador ofensivo de los Jefes de Kansas City, equipo con un viejo conocido para las Águilas: Andy Reid, el estratega que llevó al cuadro de Philadelphia al Super Bowl XXXIX.
En el Draft de la NFL de 2016, Pederson tomó la decisión de que Carson Wentz, el mariscal de campo de la Universidad Estatal de Dakota del Norte, fuera la piedra angular del proyecto que iba a iniciar. El mariscal de campo, proyectado como uno de los mejores de su posición, podía ser elegido antes por algún otro equipo, por lo que las Águilas hicieron un canje millonario con los Cafés de Cleveland, poseedores de la segunda selección global de aquel reclutamiento colegial.
Los Browns obtuvieron la octava selección global, una en la tercera ronda y otra más en la cuarta de ese año, así como el primer pick de las Águilas en 2017 y otra de segunda ronda en 2018. Por su parte, las Águilas se quedaron con dicha selección global y una de cuarta ronda del 2017.
El movimiento lució sumamente arriesgado, al parecer que los Eagles pusieron su futuro en la cuerda floja, pero a final de cuentas Pederson cumplió su cometido: subirse para así fichar a Carson Wentz.
Las primeras piezas de la franquicia fueron colocadas, pero el arranque en 2016 fue lento. Después de un inicio prometedor con tres triunfos al hilo, las Águilas solo pudieron ganar cuatro de sus siguientes trece juegos, lo que puso en entredicho si la decisión de que Carson iniciara su temporada como novato fue la correcta. Los Eagles finalizaron con foja de 7-9 y en el fondo de la División Este de la Conferencia Nacional.
Pero todo cambió en 2017. El equipo se reforzó con elementos claves como LeGarrette Blount y Chris Long –ambos campeones del Super Bowl LI con los Patriotas de Nueva Inglaterra- y jugadores de buen talento como Alshon Jeffery –que venía de los Osos de Chicago-, Torrey Smith -49ers de San Francisco-, Patrick Robinson –Potros de Indianápolis- y el mariscal de campo Nick Foles –Jefes de Kansas City-. Este último regresó a los Eagles tras haber sido titular en 2013.
El camino de los Eagles en la temporada 2017 comenzó con una victoria divisional clave contra los Pieles Rojas de Washington (30-17), pero la siguiente semana sirvió como aprendizaje, luego de que los Eagles cayeran contra los Jefes (27-20), el equipo que una semana antes dio la sorpresa al vencer a los entonces campeones Patriotas en el kickoff de la temporada.
Desde ahí comenzó una racha de nueve victorias que colocó al equipo como serio contendiente. La química de Wentz con sus corredores y receptores, junto al genio técnico de Pederson, fue dejando buenos dividendos al equipo, aunque hubo bajas sensibles en el camino.
El versátil Darren Sproles, el liniero ofensivo y capitán Jason Peters y Jordan Hicks fueron algunos de los jugadores que las lesiones no les permitieron continuar en la campaña, pero su llegada permitió la llegada de otros elementos que a la larga fueron claves. Los Eagles obtuvieron a Jay Ajayi, un prometedor corredor de los Delfines de Miami que llegó a Filadelfia en un canje por una cuarta ronda colegial.
El corredor tomó el lugar de Sproles y, junto a Blount y Corey Clement, convirtieron a las Águilas en uno de los mejores equipos en lo que a ataque terrestre se refiere.
Otra derrota, esta vez contra los Halcones Marinos de Seattle en la Semana 13 (24-10), trajo consigo nuevas dudas sobre el equipo, al señalar que los triunfos fueron, en su mayoría, contra equipos de marca perdedora.
El siguiente encuentro contra los Carneros de Los Ángeles, marcó un antes y un después en la historia de los Eagles. El triunfo 43-35 de las Águilas costó caro: Carson Wentz, que para esas fechas se perfilaba como serio candidato al MVP de la temporada, salió lesionado en una jugada donde anotó por tierra.
Una rotura del ligamento cruzado anterior de la rodilla izquierda hizo que las dudas acrecentaran alrededor del equipo. Nick Foles tomó las riendas de la ofensiva y se encargó de mantener vivas las esperanzas del equipo.
Los Eagles finalizaron con la mejor marca de la Conferencia Nacional y aseguraron jugar los playoffs en casa, pero nadie creía en ellos, al ya no poder contar con su estrella. Pese a esto, las Águilas se interpusieron a las adversidades y avanzaron en la postemporada tras ganarle a los Halcones de Atlanta (15-10) y a los Vikingos de Minnesota (38-7), con lo que volvieron al Gran Juego por primera vez en 13 años, y contra los Patriotas de Nueva Inglaterra, el equipo que precisamente les ganó en aquella edición (XXXIX).
Durante toda esta postemporada, las Águilas se quedaron con el mote de Underdogs (no favoritos) al utilizar máscaras de perro y, contra todo pronóstico, se coronaron por primera vez con un trofeo Vince Lombardi.
El balón suelto de Tom Brady y que el novato Derek Barnett recuperó fue la clave para que los Eagles ganaran 41-33 en el US Bank Stadium de Minneapolis y así conseguir su primer título de la NFL desde 1960, antes de la era del Super Bowl. Nick Foles tuvo una gran actuación con 28 pases completos de 43 intentos para 373 yardas, tres anotaciones y una intercepción, así como una anotación como receptor. Así fue como los Eagles consiguieron su primer campeonato: tras un canje millonario que a la larga representó un gran logro.