Tom Coronel, de Holanda, debió abandonar por un problema mecánico, pero pudo seguir con su segundo objetivo en el Rally Dakar, que era documentar toda su experiencia.
El piloto no pudo llegar a Salta y fue ayudado por una familia, que le dio hospedaje y comida.
El holandés se mostró conforme y agradecido, además de remarcar que comió el famoso asado argentino.