En un juego donde Atlas estuvo arriba en el marcador desde temprano, Cruz Azul consiguió un empate gracias a un penalti de último momento. La Máquina no caminó bien en el Estadio Jalisco, pero al final selló el uno por uno definitivo que arruinó la fiesta rojinegra en las tribunas.
De inicio Cruz Azul mostró destellos de peligro gracias a Jorge Benítez, sin embargo Atlas pegó primero al minuto 13’ por cortesía de Cándido Ramírez. La zaga cementera no pudo detener el avance del volante rojinegro y este entró al área por izquierda para después vencer a Jesús Corona sin mucho problema. Muy pronto en el juego los Zorros comenzaron a imponer condiciones.
Sin mucha idea para ir al frente, la Máquina siguió intentando llegar con peligro hasta los dominios de Oscar Ustari. El cuadro capitalino parecía apostar más por sus individualidades que por una verdadera acción en conjunto. Los Zorros por su parte fueron un peligro latente gracias a la velocidad de Cándido, Martín Barragán y compañía.
Por desgracia para los Zorros Barragán dejó escapar el dos por cero. Gracias a un pase de Jefferson Duque, el artillero rojinegro se enfiló solo a portería y ya dentro del área enfrió el peligro al no disparar a puerta o servir rápido a Cándido Ramírez, quien por izquierda venía con ventaja para poder fusilar a Corona.
Fue hasta el 29’ cuando Cruz Azul puso en verdadero peligro a la cabaña tapatía. Dentro del área de Ustari, Benítez disparó y estrelló la pelota en la base del palo derecho. El rebote todavía favoreció a Aldo Leao, pero el colombiano conectó sin fuerza el esférico y este terminó en las manos del meta rojinegro.
Para el arranque de la segunda mitad los de Tomás Boy fueron insistentes al frente, pero la última jugada continuó traicionando a los cementeros. Ya con Joffre Guerrón y Christian ‘Chaco’ Giménez en la cancha, Cruz Azul siguió sin encontrar claridad en las cercanías de Oscar Ustari.
Atlas tuvo en Cándido Ramírez a su hombre más peligroso en el ataque. El habilidoso volante fue un constante dolor de cabeza para una zaga capitalina que batalló de más para poder frenarlo. El chileno Enzo Roco fue uno de los que más adoleció por la velocidad del recién convocado a la selección mexicana.
Se fue media hora de la parte complementaria y los Zorros cada vez batallaron más para tener la pelota en sus pies. Aunque no pudieron imponer un claro dominio, los pupilos de Boy circularon constantemente por el área rojinegra.
Llegó el minuto 79’ en el cronómetro y con él un nuevo susto para los dirigidos por José Guadalupe Cruz. En los linderos del área, el ‘Conejo’ Benítez prendió con fuerza la pelota y su zapatazo pasó apenas desviado del poste izquierdo de Ustari.
Con el paso de los últimos minutos el buen ánimo se acrecentó en las gradas rojinegras y el grito de “ole” comenzó a sonar con cada toque de los Zorros. Parecía una noche con cierre perfecto, pero el silbante arruinó la felicidad del local al marcar la pena máxima en contra del Atlas.
El nazareno consideró que Stiven Barreiró jaló dentro del área a Joffre Guerrón y no dudó en sentenciar un penalti que a la postre convirtió Francisco Silva al 91’. Tras el silbatazo final la rechifla comenzó en contra del árbitro y los Zorros se perdieron la oportunidad de sumar su tercer triunfo consecutivo en casa.
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MC