—Lleva dos veranos doblando con la Sub-20 y la absoluta. Parece que no para…
—Es un cambio de chip, de una Selección en la que mi objetivo es aprender con pocos minutos a tomar responsabilidades y hacer de líder. Al principio cuesta, pero mis compañeras me lo han puesto muy fácil. A veces te cansa, ¡parece que no tienes vacaciones! Pero no lo cambiaría por nada.
—¿Cómo lleva una chica de 20 años tener tanta presión desde hace tanto tiempo?
—La verdad es que me lo tomo con tranquilidad. No soy una persona que se estrese demasiado. No lo tomo como una presión: me encanta el baloncesto, disfruto con ello.
—Siete jugadoras de la Sub-20 están en la NCAA. ¿Juegan tan bien porque están allí o están allí por lo bien que juegan?
—(Ríe) Nos hemos ido allí por cómo estaba la situación aquí, donde la Liga no está muy bien. Allí tenemos la oportunidad de estudiar una buena carrera y a la vez formarnos en el baloncesto, donde el nivel es altísimo.
—En verano el baloncesto femenino vive un boom en España. ¿Se acerca en algo a la repercusión de la que goza en Estados Unidos?
—Parece que la gente lo sigue más, que aparece ahora más en los medios. El éxito de las selecciones ayuda a enganchar. El cambio se nota, pero en Estados Unidos el tema de espacio en los medios, de organización... todo está a otro nivel.
—Y el deporte femenino en general, ¿cree que se valora aquí lo suficiente?
—Hay muchas deportistas femeninas que se merecen una mayor cobertura y que se valore más lo que hacen. El deporte femenino español está consiguiendo muchísimas cosas, creo que quedan todavía por dar muchos pasos adelante en este tema.
—¿Qué dice de la WNBA?
—Es una de esas cosas que me gustaría probar si llega, pero no es un objetivo que tenga fijado. Si llega la oportunidad habrá que vivirla.
—¿Cómo lleva las comparaciones con Ricky Rubio?
—(Ríe) Ojalá pudiera parecerme mucho a él. Su estilo es más imaginativo, esos pases que da… pero es un orgullo que te puedan comparar con alguien tan bueno como él.
—Y ahora, ¿qué hará durante las vacaciones?
—A finales de agosto volaré a Estados Unidos para empezar la pretemporada con Florida State. Me gusta ir a la playa, estar con mis amigas...
—Tengo entendido que quería ser futbolista…
—Sí, pero como no había equipo de chicas en mi colegio me dio por jugar al baloncesto, que sí tenía un equipo mixto. Me gustó mucho, empecé a jugar y parece que no salió mal.
—Y entonces su equipo y jugador favorito son...
—Me gusta mucho Iniesta. Siempre he sido más del Madrid aunque hay muchos jugadores que me gustan del Barça. En baloncesto sí soy más del Madrid. Y también habrá que apoyar a Las Palmas, que ha subido a Primera.