Por Carlos Marroquín
La distancia que hay entre Perú y Japón es de 15 mil 492 km, línea aérea aproximada. 9 mil 627 millas. 8 mil 360 millas náuticas. El tiempo que duraría el viaje en un Airbus A320 sería de 19 horas con 21 minutos y en un Airbus A380, 16 horas con 23 minutos. Nos diferencian 14 horas, las que obligan a girar el reloj interno por completo. En otras palabras, ‘cruzar el charco’ se convierte en un sacrificio de casi 24 horas de espera. Bueno, ese fue el precio que le tocó pagar a Kaiser para convertirse en el luchador peruano que más lejos ha llegado en la historia de este deporte. Pero, no solo por el astronómico viaje que se mandó, sino por haber peleado, y de gran forma, en una de las ligas japonesas más importantes que existe, Pro Wrestling NOAH.
Su carrera comenzó hace más 10 años. Previamente, practicó artes marciales mixtas, pero una rotura en el tendón de Aquiles le quitó la oportunidad de seguir. Luego, revisando foros encontró que existía una empresa nacional de lucha libre llamada LWA y decidió ir a entrenar. Desde esa vez no ha parado hasta darle forma a Kaiser, uno de las propuestas peruanas más rudas y técnicas que existe. Y ese es su gran diferencial: ser un todoterreno.
Hace una simbiosis. A la hora de aplicar sus golpes, no solo despide mucha fuerza. También, puede sorprender a sus rivales con alguna movida aérea, desde una una patada voladora o un salto de espaldas fuera del ring. O con distintas variantes de llaves, ya que toda la experiencia que acumuló dentro de las artes marciales le dan ese plus de dominar la lucha de piso. No por nada el público lo bautizó como ‘La Máquina del Castigo’.
Y si hablamos de títulos, Kaiser ha sido campeón de la LWA con el reinado más largo de la historia de esta empresa. Se adueñó del cinturón cerca de un año y tuvo hasta 10 defensas invictas, siendo este el récord de la marca. Hasta la fecha, ninguna otra estrella nacional ha conseguido tener tanta vigencia sobre el ring.
Llegar a Japón no fue pura casualidad. Kaiser también es promotor y en 2011 trajo a Kenta (hoy Hideo Itami en WWE) para realizar una pelea de exhibición. Durante esa gira, también estuvieron los productores de la empresa que veía los derechos de ese luchador, Pro Wrestling NOAH. Ahí es donde se dieron que nuestra carta tenía nivel para irse a otras ligas. Y así fue.
Su viaje se da en 2012 y ahí se codea con Zack Sabre Jr, la leyenda japonesa Kenta Kobashi, Fénix, Naomichi Marufuji, Paul London, entre otros. Por ejemplo, en NOAH se reencontró con Hideo Itami. Se hicieron amigos. Como anécdota, recuerda que una vez le escondió su campeonato antes de salir a pelear, al punto de movilizar a toda la producción en su búsqueda. Pero, también recibió de la suya. Hideo le escondió su ropa de pelea y tuvo que salir a un show con el único short de entrenamiento que tenía a la mano.
(Foto: Internet)
Kaiser se ha diferenciado de sus colegas nacionales por construido un sello a nivel internacional: ser reconocido como el Inka Kaiser. Este soberano apelativo se lo puso el ya fallecido director de NOAH, Ryu Nakata. Para el japonés, nuestro crédito representaba a la fuerza y firmeza que identificó a los fundadores del Imperio Tawantinsuyo, opinión que no se aleja a la realidad. En sus combates, utiliza una técnica cargada de agresividad, similar al salvajismo de un guerrero incaico en pugna por defender sus tierras. Con el pasar del tiempo, supo interiorizar este sobrenombre al punto de llevarlo estampado en medio de su atuendo de lucha, en donde utiliza como referencia al logotipo de una conocida marca de gaseosas para darle forma.
(Foto: captura)
Kaiser también es el único luchador peruano que ha compartido camerino con Shinsuke Nakamura. Sucedió en 2014, la segunda vez que fue invitado a pelear en NOAH. Al inicio, el ex campeón de NXT pensaba que nuestro representante era brasileño, porque al darle la mano le dijo que venía de Sudamérica. Entonces, Nakamura comenzó a comunicarse en portugués. Pero, cuando corrigió que en realidad era de Perú, Nakamura reaccionó y automáticamente comenzó a hablar en español, sin ningún problema. Hubo química y terminaron por agregarse ese mismo día a Facebook. Hasta la fecha, no han perdido contacto. Incluso, ya han coordinado para saludarse cuando la WWE esté de gira por nuestro país. Y si el tiempo alcanza, compartirán un cevichito.
El Inka Kaiser Volverá a Japón este 13 de julio para ser parte del Jr. Heavy Tag Team League 2017. Hará equipo con el chileno Gastón Mateo y de sobrevivir, tendrá importantes chances de quedarse varios meses en este país como campeones. Estoy seguro de que puede lograrlo. Su experiencia le da los votos necesarios. Las pruebas hablan solas.
(Foto: Internet)
Antes de girar por tierras niponas, Kaiser se sumará a ‘La Resistencia’, segundo evento de Imperio, empresa nacional para la que trabaja oficialmente. La cita es este 1 de julio y hará equipo con su inseparable compadre Caoz, otro gran valor nacional que es conocido en el exterior. También estarán el gran Chuck Taylor (ex PWG y Chikara), los chilenos Alejandro 'XL' Sáez y Al-Cold y figuras peruanas como Axl, Reptil, Mansilla, Caoz, el Virrey de Salamanca, TVK, entre otros. Será un nuevo reto, pero la ‘Maquina de la Destrucción’ llegará con el suficiente recorrido para hacerle frente a cualquiera. Está claro.