“Contract year. Año de contrato”. Ése es un término clásico cuando hablamos de los contratos de jugadores en la NFL. Estos hombres tienen una motivación especial de cara a la próxima temporada, saben que deben dejar un buen sabor de boca en sus actuales propietarios para poder negociar un nuevo y jugoso contrato o bien para ser uno de los peces gordos en la siguiente agencia libre.
ARIZONA CARDINALS: Sean Weatherspoon, Jerraud Powers, Drew Stanton, Matt Shaughnessy, Lorenzo Alexander, Dave Zastudil, Ted Larsen, Rashad Johnson, Mike Leach, Lamarr Woodley, Bobby Massie, Justin Bethel, Alfonzo Dennard, Tony Jefferson, Jaron Brown.
Arizona no está en riesgo de perder a ningún jugador fundamental en sus esquemas. Quizás el nombre más destacable es el de Tony Jefferson, un “undrafted” que claramente ha excedido las expectativas. En cualquier caso, sería un agente libre restringido y en el peor de los finales recibiría compensación inmediata el equipo si llegara a marchase. Fundamentalmente es en la secundaria donde los Cardinals podrían sufrir más bajas: Rashad Johnson, Justin Bethel, Jerraud Powers y Alfonzo Dennard (reclamado en waivers de New England) también finalizan contrato.
El hombre que más se juega es Sean Weatherspoon, un jugador joven y que se ha mostrado muy válido en esta liga, pero que lleva casi dos años sin jugar por culpa de las lesiones. Arizona estaría encantado de renovarle a la baja si consigue por fin mantenerse sano.
ST. LOUIS RAMS: Nick Fairley, Mark Barron, William Hayes, Rodney McLeod, Cory Harkey, Austin Davis, Eugene Sims, Brian Quick, Janoris Jenkins, Isaiah Pead, JoLonn Dunbar, Trumaine Johnson, Nick Foles, Greg Zuerlein.
Los dos fichajes de mayor impacto de los Rams esta campaña, Nick Fairley y Nick Foles son quienes precisamente están en un año de contrato. El defensive tackle tendrá mucho que demostrar, su talento y habilidad están ahí pero por diferentes motivos nunca ha encajado todas las piezas. Rodeado por probablemente la mejor línea defensiva de la competición lo tiene todo a su favor para destacar. En el caso de Foles se está trabajando una renovación de contrato, St. Louis quiere apostar por él como quarterback de futuro.
En la secundaria los Rams tienen un pequeño atasco con hasta cuatro jugadores próximos a ser agentes libres, siendo quizás Janoris Jenkins el más valioso. El kicker Greg Zuerlein podría ser objetivo de la etiqueta de jugador franquicia como hicieron los Patriots con Stephen Gostkowski esta “off-season”.
SAN FRANCISCO 49ERS: Aldon Smith, Vernon Davis, Phil Dawson, Alex Boone, Shareece Wright, Reggie Bush, Ian Williams, Chris Cook, Craig Dahl, Kendall Hunter, Michael Wilhoite, Joe Looney, Tony Jerod-Eddie,
Los 49ers tienen menos jugadores en su último año de contrato que sus rivales divisionales pero los nombres son muy destacables. Aldon Smith jugará esta temporada tras ejercer el equipo la opción del quinto año como ex primera ronda del draft. De no ser por sus problemas extra deportivos a buen seguro habría renovado ya, pero los niners no quieren comprometer tanto dinero hasta ver que finalmente ha madurado. Vernon Davis está también en un año clave, viene de una campaña pésima y si quiere un último gran contrato necesitará hacerlo muy bien en 2015. Alex Boone ya ha dado en el pasado más de un quebradero de cabeza al front office del equipo y parece probable que terminará su relación con la franquicia a la conclusión de la liga. Un jugador a vigilar es Ian Williams, un nose tackle cuya evolución está siendo particularmente buena y que podría generar mucho interés en la próxima agencia libre.
SEATTLE SEAHAWKS: Russell Okung, Brandon Mebane, Tony McDaniel, Athyba Rubin, Jermaine Kearse, Bruce Irvin, Jon Ryan, Tarvaris Jackson, Bobby Wagner, Will Blackmon, Anthony McCoy, Lemuel Jeanpierre, Will Tukuafu, Demarcus Dobbs, Russell Wilson, Ricardo Lockette, Robert Turbin, Jeremy Lane, J.R. Sweezy, Chris Matthews, Marcus Burley, Cooper Helfet.
Seattle tiene con diferencia la lista de posibles agentes libres más larga, hasta 33 jugadores podrían abandonar la franquicia el próximo año. De ninguno se está hablando más que de Russell Wilson. Hasta el seguidor más casual de la NFL sabe que el quarterback está en plena disputa contractual. Las previsiones son tres: desde la más optimista que renueve antes del inicio de liga (poco probable); que juegue esta campaña por apenas 1.5$ millones y en 2016 consiga un gran contrato (algo más posible) o bien que reciba la etiqueta de jugador franquicia el año que viene si el acuerdo no llega en ningún caso (lo que no desean ambas partes). En resumidas cuentas, Wilson no probará en cualquier caso las aguas de la agencia libre, pero sin duda que este culebrón puede tener repercusiones negativas en el equipo si se alarga tanto como parece.
Del resto de jugadores destaca claramente Bobby Wagner, uno de los mejores linebackers centrales de la competición y que probablemente consiga su contrato antes que Wilson. El left tackle Russell Okung también pedirá bastante dinero por su categoría y por la importante posición que ocupa. Brandon Mebane y Bruce Irvin son otros dos grandes defensores pero en algún momento los Seahawks se quedarán sin espacio salarial. Es por ello que seguramente salgan del equipo en 2016.