Ayer la compañía de artes marciales mixtas más prestigiosa del mundo celebró el evento en vivo UFC Fight Night 112, que contaba con una de las peleas estelares más emocionantes del año tras una gran rivalidad creada por ambos peleadores.
Sin embargo, la pelea fue arruinada cuando faltaba menos de un minuto para finalizar el primer asalto. El árbitro detuvo a Kevin Lee, que estaba agarrando por el cuello a Michael Chiesa, como si este se hubiera rendido o hubiera quedado inconsciente.
Nada más “perder” Maverick comenzó a mostrar su enfado por la pronta detención del árbitro. Sus críticas fueron mucho más allá. De esta forma explicaba cómo se siente tras la polémica durante la entrevista posterior en Fox Sports.
Recuerdo buscar las manos de Kevin, ver en la pantalla que tenía 32 segundos. Subí los hombros, tensé el cuello y subí mis manos, quería que se cansaran sus brazos para buscar escapar. Vi a Mario acercarse y en el momento que lo vi, lo sabía. El tipo tiene reputación de ser un mal árbitro. No solo me robaste a mí, robaste a los aficionados una gran pelea y a Kevin. Kevin tiene una victoria sobre mí y no hay muchos en el mundo que han hecho eso, pero ahora no es una victoria, está llena de controversia. Vamos a ir a la comisión para que el resultado cambie. Quiero la revancha. Dos peleas antes vimos a Justine Kish siendo estrangulada y la dejaron continuar y en el evento estelar todo se cae a pedazos. Mario Yamasaki debe entrar a un hoyo y jamás regresar a un evento de MMA. Jamás debería volver a oficiar un evento. Debería pasar más tiempo leyendo las reglas que hacer su estúpida señal de corazón a la cámara.
Fuente: Indiscutido