Oleg Tinkov, el financiero ruso propietario del Tinkoff-Saxo, en el que corre Alberto Contador, está dispuesto a boicotear el Tour del año próximo, si otros equipos le apoyan, para forzar a los organizadores a cambiar la gestión del ciclismo profesional y convertirlo en un negocio rentable.
"Para hacer la revolución, los equipos tienen que unirse", explicó en una entrevista publicada hoy por el dominical "Le Journal du Dimanche" Tinkov, que añadió que si consigue el apoyo de otros responsables "se puede boicotear el Tour 2016".
Su objetivo es forzar a la ASO, la empresa dueña de la ronda francesa, para que se siente a negociar y se establezcan unas condiciones económicas más favorables para los equipos porque hasta ahora no ha aceptado discutir.
El banquero ruso cuenta que él invirtió en el ciclismo "por pasión", pero es "un verdadero capitalista" y lo que querría es que su "juguete sea rentable".
"Mi sueño es que la bicicleta sea un negocio" y para eso -argumentó- hay que cambiar toda la arquitectura, empezando por los productos de promoción comercial, que sólo suponen 2 millones de euros de un presupuesto de 27 millones.
También quiere "crear un verdadero sistema de traspasos" para que los equipos puedan ser financieramente más sólidos.
"Los equipos ciclistas no pueden vivir únicamente con el dinero de los patrocinadores, eso no se aguanta. Hay que crear una liga profesional para establecer el reparto" del negocio, indicó.
Pero, sobre todo, quiere un reparto del dinero de los derechos de televisión, de los patrocinadores del Tour o de lo que pagan las ciudades en las que empiezan o terminan las etapas.
Tinkov ha creado un grupo con algunos de los mayores equipos, bautizado Velon, y quiere que los demás se le sumen antes de negociar con ASO.