Manny Pacquiao sigue descontento con la decisión unánime que decretó su derrota en la lucha por el título del peso welter de la Organización Mundial de Boxeo ante Jeff Horn, a pesar de una revisión independiente sobre la puntuación del combate del 2 de julio. El púgil filipino dijo que no tiene planes para retirarse.
Tres de los cinco jueces independientes que repasaron la pelea concedieron la victoria a Horn, uno a Pacquiao y el otro la marcó como un empate, explicó la OMB el lunes en un comunicado.
Un departamento del gobierno de Filipinas solicitó a la OMB la revisión de la actuación del referí y los jueces en la llamada “Batalla de Brisbane”, en Australia, después de que Horn, que optaba por primera vez al cetro mundial, ganase por decisión unánime a Pacquiao, que atesora 11 títulos.
La revisión concluyó que Horn ganó siete rondas y Pacquiao cinco.
Pacquiao fue citado después en medios filipinos diciendo: "Dejemos que la gente juzgue por sí misma (...) la gente vio lo que ocurrió. Hemos visto peores juicios en el pasado, donde los jueces manipularon resultados. Nada me sorprende ahora”.
Pacquiao, de 38 años, dijo el miércoles en Twitter que no colgará los guantes, sugiriendo que la pelea contra Horn, un exmaestro de escuela de 29 años, podría repetirse.
"Amo este deporte y hasta que esa pasión desaparezca seguiré luchando por Dios, por mi familia, por mis seguidores y por mi país”, señaló Pacquiao.
Horn celebró el resultado de la revisión de la OMB.
El juez estadounidense Waleska Roldan puntuó el combate, disputado ante más de 51.000 personas, con 117-111, mientras que su compatriota Chris Flores entregó una anotación de 115-113, la misma que el argentino Ramón Cerdán. Pacquiao metió en predicamentos a Horn en el noveno asalto, dejándolo tambaleante pero sin lograr el nocaut.
Horn reaccionó en las postrimerías de la pelea para mantenerse invicto en 18 pleitos profesionales.
Medios australianos reportaron que la repetición del combate podría celebrarse en noviembre, también en Brisbane.