Que Leo Messi y Neymar no estén en Estados Unidos con el resto de la plantilla no es solo un problema para Luis Enrique y su preparación de la próxima temporada que de manera oficial dará inicio el día 11 en Tbilisi (Georgia) ante el Sevilla en la Supercopa de Europa. En el departamento de marketing del club son conscientes de que la presencia de la pareja de cracks mejora de manera relevante el caché del colectivo. Lo dicen los ingresos.
La idea inicial para este verano era la de ir a Asia, donde tanto el club a nivel particular, como la admiración que levantan el argentino y el brasileño a nivel individual, hacían que el escenario fuese ideal, pero la Copa América y la idea que ambos podrían llegar muy lejos en la competición (con Messi no se equivocaron, puesto que llegó a la final) hicieron tomar la salida que más convenía al club, que el pasado verano suspendió un tour internacional y se decantaron por Estados Unidos.
Por jugar tres partidos en la Internacional Champions Cup, el Barça se llevará un talón que rondará entre los seis y los ocho millones de euros, según informaron a AS fuentes del club. Luego está el choque de Florencia el 2 de agosto, de la misma competición, que les dejaría otros dos millones para reforzar la caja fuerte, siendo éste el último choque sin valor oficial del verano.
Hace unos días, Luis Enrique ya dijo que a él lo de las giras no le gustaba. El verano anterior lo pudo lograr, pero este tuvo que aceptar las necesidades del club, que mira con mucho interés que Messi y Neymar estén en todas los actos en los que participe el equipo. El mensaje es que la marca Barça debe seguir implantándose, pero eso está ligado a sus dos estrellas.