Alfred Finnbogason jugará finalmente la próxima temporada en la liga griega. El delantero islandés va jugar cedido en Olympiakos, después del acuerdo al que han llegado las tres partes, el jugador, el club realista y la entidad de El Pireo. El internacional absoluto con Islandia no cuenta para David Moyes y la Real le buscaba acomodo con una cesión que le permitiera revalorizarse para después poder recuperar parte de la importante inversión que hizo el club donostiarra el pasado verano (pagó 7,5 millones al Herenveren).
En un principio, y sobre todo por la insistencia de su director general, el PAOK Salónica parecía que iba a ser su destino final. Pero las negociaciones no han llegado a buen puerto, sobre todo porque el PAOK no tenía intención de incluir una opción de compra en el acuerdo, ni pagar un cantidad extra por la cesión, además de hacerse cargo de la ficha. Una de esas premisas sí las ha cumplido Olympiakos, que se va a hacer cargo durante la proxima temporada de la ficha de Finnbogason y, además, ha incluído en el acuerdo una opción de compra cifrada entre 6 y 8 millones de euros, alrededor de unos 7 millones de euros, algo que satisface y mucho las expectativas de la Real, porque puede recuperar casi toda la inversión que hicera la pasada campaña con su contratación.
Si el jugador recupera su olfato goleador en Grecia, y convence a Olympiakos, el campeon de Grecia la pasada temporada tiene de plazo hasta junio de 2.016 para hacer efectiva de forma unilateral esa opción de compra, algo a lo que la Real no se opuso porque dentro de un año puede rentavilizar su inversión por Finnbogason sin tener que negociar nada con ningún otro club, y podría disponer de una cantidad añadida para buscar otro refuerzo en el mercado.
Finnbogason no ha sido incluido en la lista de 21 convocados para el amistoso que jugará la Real Sociedad en San Juan de Luz contra el Toulouse, y tampoco aparece en la relación de lesionados que ha dado el club. El islandés tampoco viajará a China el domingo y se quedará en San Sebastián esperando a que su cesión a Olympiakos sea oficial para desplazarse a Atenas para firmar su nuevo contrato y pasar el pertinente reconocimiento médico. El acuerdo entre las tres partes es total, a falta sólo de flecos burocráticos para que pueda estar cerrado totalmente. Finnbogason, después de hablar con Moyes y entender que no entra en sus planes, ha aceptado esta cesión que le va a permitir jugar y volver a ganar la importancia perdida este año de casa a la Eurocopa del próxima año. Se juega una convocatoria clave en su carrera.