Luego de cinco intensos rounds, Juan Francisco Estrada logró encontrar la forma de imponer su estilo y dominar el resto de la contienda a un Carlos Cuadras que buscaba convertirse en el retador mandatorio por el título supermosca del Consejo Mundial de Boxeo.
El ex campeón de Puerto Peñasco, Sonora, cedió parte del terreno en los primeros cinco episodios dejando trabajar a sus anchas al sinaloense que con nutridas combinaciones ladeó la balanza a favor.
Sin encontrar la distancia adecuada, Estrada cayó a merced del Príncipe, quien cambiando de guardia y metiendo potentes volados logró impactarlo en varias ocasiones, pero sin hacer el daño deseado.
Para el sexto, Estrada cambió la estrategia y usando el contragolpeo poco a poco maniató a su rival, quien sin importar el castigo se seguía lanzando al ataque en busca de cambiar su suerte.
El cansancio comenzó a mostrar su efecto por el séptimo round y Estrada comenzó a apretar el acelerador forzando a Cuadras a ser mucho más activo para quemar lo último de energía que había en el tanque.
Al décimo round un volado al rostro mandó a la lona a Cuadras, quien a pesar de que se incorporó a seguir la pelea, no pudo encontrar el camino para recobrar la batuta del duelo y al final terminó sumando su segundo descalabro profesional.
Al final, los jueces dieron tarjetas 114-113, 114-113 y 114-113, pero por minutos la polémica ensombreció el ring ya que el afamado anunciador Michael Buffer equivocó el ganador y dio la pelea a Carlos Cuadras.
De inmediato el anunciador corrigió el error y tranquilizó a los fanáticos que abucheaban sonoramente.
“Sentí que era un gran robo, pero gracias a que corrigió me siento bien. Hicimos un muy buen trabajo, aunque me hubiera gustado que fuera por nocaut, pero Cuadras es un gran peleador”, declaró El Gallo, quien ahora esperará a que se defina el futuro del cinturón supermosca del Consejo Mundial de Boxeo.