El ciclista británico Chris Froome (Team Sky), virtual ganador de la 102ª edición del Tour de Francia tras sobrevivir a los ataques del colombiano Nairo Quintana en la penúltima etapa, ha sufrido una nueva agresión de un aficionado en la ascensión a Alpe d'Huez al recibir un escupitajo a tres kilómetros de la meta.
No es la primera acción antideportiva hacia el líder de Team Sky, al que se le ha acusado durante la última semana y media de dopaje por el gran ritmo que ha demostrado en las dos últimas semanas de Tour de Francia.
La primera agresión fue en la decimocuarta etapa cuando Froome desveló que un aficionado le tiró "una taza con orina" antes de llegar a Mende. "Después de 50 o 60 kilómetros un espectador me tiró un vaso con orina y me ha gritado 'dopado'. Estoy muy decepcionado de escuchar estas cosas", explicó, en declaraciones a L'Equipe.
En la jornada del viernes, durante la decimonovena etapa, 'Biohazard' también recibió otro escupitajo a pocos kilómetros de la meta en La Toussuire y otro aficionado le faltó al respeto con un corte de mangas.
Froome no fue el único miembro del Sky afectado por los insultos y los feos gestos de algunos aficionados. Uno de los coches del equipo británico llegó a meta con numerosas manchas de restos orgánicos.