Una vez cruzado su ecuador y a falta de nueve grandes premios para terminar la temporada la situación es clara: el campeonato se disputará en torno a tres pilotos. Dos de Mercedes. El restante de Ferrari.
Este último ha hablado en unas declaraciones a la BBC, sí, se trata de Sebastian Vettel. El piloto teutón, después de la victoria en Hungaroring ha ganado una gran dosis de optimismo pero siempre pendiente de pisar el freno. "Todavía hay mucho trabajo que hacer para llegar a su nivel, pero nunca se sabe", ha querido puntualizar.
Hamilton, 202 puntos. Rosberg, 181. Vettel, 160. En ciclismo se diría que el alemán está haciendo la goma pero la realidad es diferente. En Ferrari aún creen y en el box de sus rivales hay cierto nerviosismo, como dejaron claras las declaraciones del jefe de Mercedes, Toto Wolff, disgustado con la dinámica de la escudería en Hungría.
Vettel, con todo esto sobre la mesa, quiso tirar de épica: "Estoy seguro de que vamos a tratar de hacer absolutamente todo para intentar hacer posible lo imposible. La mejor manera de hacerlo es manteniendo la calma, tratar de hacerlo lo mejor posible y luego veremos dónde nos lleva este viaje". Hay campeonato.