Al técnico Reinaldo Rueda sus jugadores le quedaron debiendo eso que tanto hicieron bajo el mando de Juan Carlos Osorio: envalentonarse ante la adversidad y darle vuelta con argumentos a una situación complicada.
Atlético Nacional pagó caro el desperdicio en casa. Y en el Metropolitano, según el estratega vallecaucano, no tuvo la eficacia que requería el partido exigente que le planteó Atlético Junior. Además, le faltó reaccionar antes los dos goles seguidos del rival y terminó despidiéndose por primera vez en los octavos de final de la Copa Águila.
Rueda analizó el compromiso en el cayó 2-0 en Barranquilla, habló del ambiente hostil que tuvo que enfrentar Macnelly Torres, de la obligación de ganar que tenía Junior tras caer en la Liga ante Cortuluá y de las fallas que llevaron a la escuadra verdolaga a despedirse de la opción de estar en la Copa Suramericana.
Balance del juego: "Hicimos un buen control de juego. En el primer tiempo hubo situaciones en las que parecíamos nosotros el local por el control y la posesión de balón, mientras Junior se replegaba y salía rápido. En el segundo tiempo, con la situación adversa de gol al minuto 6, cambia la dinámica. Nos faltó madurez para asimilar. Además, fue muy rápido el segundo gol de Junior. Ahí fue donde se perdió el orden. Vinieron situaciones en las que quisimos resolver en la individual cuando debíamos conservar la calma que tuvimos al principio".
Falta de reacción de Nacional: "El partido estaba controlado. Nos faltó el gol. Lo buscamos, quizá no con la precisión ideal. Nos faltó haber concretado en el primer tiempo cuando teníamos el control del partido. Ya en el segundo nos faltó tranquilidad para hacer algo que Nacional sabe hacer muy bien, y es que ante la adversidad tener el criterio y los argumentos para remontar el marcador y haber llegado a la paridad".
Dos goles rápido: "Hasta el 0-0 el partido es equilibrado, pero nos faltó asimilar ese gol en contra y no haber recibido el segundo. Por ahí pasa todo. Donde se sostenga el 1-0 y se hubiera podido buscar con más claridad la paridad. Junior fue muy certero y ahí se definió el juego".
Ambiente hostil para Macnelly: "Es una situación a la que nos vimos abocados y la hablamos con el grupo. No era fácil esa decisión. Él quería jugar. Nos exponíamos a eso. Era un hombre que iba a estar bien referenciado y que iba a tener esa energía negativa. Por encima del respeto que tiene por Junior está el tema familiar, que fue el que lo forzó también a tomar la decisión de cambiar de institución. Y por encima de la familia no hay nada. Nosotros lo respaldamos. Algún día tenía que jugar acá y sobreponerse. Es un valor nacional importante y la afición barranquillera con el transcurrir de los días lo va a entender y lo va a seguir queriendo y respetando como siempre".
Fallas de Nacional: "Nos faltó eficacia. Junior hizo un juego inteligente. En el primer tiempo hizo un repliegue rápido con un bloque de espera muy agresivo y nos salía rápido. No hizo la exposición que normalmente hace Junior en los primeros 45 minutos, en la que se va muy de frente al ataque. Fue inteligente y por eso soportó el control del partido que hicimos. Nos faltó ser eficaces en la jugada final".
Un Junior necesitado y Alexis Mendoza: "Un duelo intenso por la características de los dos conjuntos. Tanto Atlético Nacional como Atlético Junior tienen dos muy buenas nóminas que expresan buen fútbol. El resultado del domingo nos complicó más el juego a nosotros (Junior perdió con Cortuluá en Liga). Así lo evalué. Eso hizo que Junior estuviera con otra tensión y disposición, lo que llevó al que el partido fuera más exigente para nosotros. Ese es el fútbol. Hoy Alexis sigue su camino y todos reconocen su capacidad, el gran equipo que ha conformado, el buen torneo que hizo y lo que puede venir hacia el pasado".