José Manuel Calderón no es sólo un gran jugador de baloncesto. Es mucho más. Es un enamorado de Extremadura, su tierra, de su gente, su cultura y, claro está, su jamón de bellota. Por ello, el base internacional dejó durante unas horas el balón y los entrenamientos para presentar en Fregenal de la Sierra (Extremadura) junto a un grupo de periodistas, su nueva aventura empresarial: Dehesa Calderón (www.dehesacalderon.com).
Un proyecto centrado en la venta de jamón que surgió en 2007, cuando el jugador de los Knicks se dio cuenta de que “el que comía fuera, no era como el que conocía”. En sus origenes, fue algo familiar, para los amigos, que se trasmitía solamente por el boca a boca. Pero le faltaba el empuje definitivo... hasta hoy. “Es el momento de hacerlo. Ahora ya puedo presentar todo el trabajo realizado durante todo este tiempo”, comentó un Calde que no acudirá este verano con la Selección al Eurobasket, por una lesión en el tendón de Áquiles que le hizo perderse los últimos 25 partidos de la temporada en la NBA: “Me duele no estar con España, sobre todo por lo importante de una cita en la que nos jugamos el pase a los Juegos Olímpicos de Río”.
No luchará junto a sus compañeros en esta dura andadura hacia el oro y el billete a Brasil, pero ellos le recuerdan y querrían que estuviera en la concentración... aunque no estrictamente por su calidad: “Te echaremos de menos, pero no podemos echar de menos tu @Dehesacalderon... mándate uno”, le recordó Fernando San Emeterio a través de Twitter. Tener amigos para esto.