La británica Paige , quien volvió a la WWE hace tres semanas luego de un año y medio de ausencia, reveló en el podcast de Lilian Garcia varios detalles sobre los difíciles momentos que vivió cuando estuvo alejada de la compañía. En especial por el consumo de sustancias ilegales que le costó una larga suspensión.
"Tuve una vida muy similar a la de Britney Spears en 2005. Estuve muy cerca de raparme el pelo. Lo único que hacía era beber, y cada vez necesitaba más. Estaba completamente metida en el mundo de las fiestas, simplemente trataba de ser cool con un grupo de amigos que quería que gaste mi dinero en ellos", explicó Paige.
En cuanto a su segunda suspensión en la WWE, Paige reconoció que se debió al consumo de drogas ilegales, por lo cual asumió toda la responsabilidad. Y explicó que su escándalo de doping por consumir pastillas también terminó afectando su relación amorosa con el luchador Alberto del Río.
"Entonces inicié una relación con Alberto del Río y fue como una batalla perdida una vez que todo salió a la luz en las redes sociales. [...] Me sentía sola y sentía mucho dolor en el cuello. Pensaba que tomando una pastilla todo estaría bien. No me consideraba adicta a ellas. Y realmente no lo era, porque dejé de tomarlas tras ser humillada en las redes por este tipo de acciones. Tuve un estúpido error, fue muy malo. Me arrepiento mucho", agregó Paige.
Paige volvó junto a las exestrellas de NXT Mandy Rose y Sonya Deville. (WWE)
Paige volvó junto a las exestrellas de NXT Mandy Rose y Sonya Deville. (WWE)
Sin embargo, Paige reconoció que la filtración de sus videos sexuales la terminaría hundiendo aún más dentro de su depresión. "Sentí que el mundo se venía abajo cuando un hombre en un bar me preguntó si yo era la chica del porno", agregó la británica, quien en ese momento fue hospitalizada por presentar también un cuadro de anorexia.
A pesar de los complicados momentos que le tocaron vivir, Paige reconoció que la confianza que le dieron Triple H y Stephanie McMahon fue clave para su posterior regreso a la WWE. "Me dijeron que todo iba a salir bien y que estaba de vuelta en casa", finalizó la británica.