Arian Foster, el running back estrella de los Houston Texans, ha dejado los entrenamientos del training camp del equipo cojeando y, según diferentes medios locales, puede perderse al menos ocho partidos.
El corredor ha sufrido una "severa lesión" el músculo aductor y podría tener que pasar por quirófano obligando al equipo a ponerle, mínimo, en la lista de lesionados con opción de regreso, informaron la ESPN y el Hoston Chronicle. Caso se confirme las noticias, eso haría con que Foster no volviera hasta la 10ª semana de la temporada.
Arian Foster's groin injury is serious in nature. Source said it should require surgery & may be candidate for IR w/ designation for return.
— Jayson Braddock (@JaysonBraddock) agosto 4, 2015