El Real Oviedo, que hace tan solo unos días caía ante el Atlético de Madrid (0-2) en el "Carlos Tartiere", cambió las tornas ante un nuevo rival de la Liga BBVA, el Deportivo de La Coruña, que encajó el segundo tanto definitivo en las postrimerías del encuentro, después de que los asturianos abrieran el marcador en los primeros instantes del choque.
La cita se disputó en un terreno neutral, el estadio "Reino de León", al tenerse que preservar el terreno ovetense para el próximo España-Eslovaquia de clasificación para la Eurocopa.
El conjunto gallego, a pesar de las ausencias y de algún fichaje que aún tiene pendiente realizar, demostró que tiene trabajo por delante para conjuntar un equipo que muy pronto encajó el primer tanto, al transformar Susaeta una pena máxima consecuencia de un mal despeje de Lux y una falta sobre Hector Font, lo que aún desconcertó más al equipo de Víctor Sánchez.
Los deportivistas, excesivamente romos en ataque, permitían a su rival jugar a placer, sin que pasara por ningún tipo de apuro la puerta del veterano guardameta Esteban, mientras que el Oviedo creaba ocasiones en las botas de Borja Valle y Susaeta.
Solo en el tramo final despertó el Deportivo y tras una buena jugada bien trenzada por los gallegos, llegó el empate en el único despiste defensivo asturiano al adelantarse Cardoso a defensa y guardameta para empatar (1-1), mientras que el debutante Fede Cartabia pudo marcar el segundo tanto ante el error de Esteban.
El equipo de Egea, en el que debutó Pablo Hervías, pagó el esfuerzo del primer tiempo y el Deportivo, con seis cambios en este segundo acto, se mostró más contundente y con más llegada, aunque el marcador no se movía.
Sin embargo, la insistencia del equipo de Sergio Egea acabó dando frutos y en el último minuto Cristian Rivera anotaba el 2-1 definitivo, ante la pasividad de la defensa gallega.