Antes de acabar el 2017, PROGRESS realizó un último show con el ‘truco’ de ser un cartel sorpresa, es decir, no había ninguna lucha anunciada, con el objetivo de crear una noche de sorpresas por doquier. Al empezar el show, Jim Smallman saludó a los ‘nuevos’ de entre el público, uno de ellos confesó nunca haber visto lucha y bueno, pues estaba a punto de tener una probadita muy especial.
A continuación los resultados de PROGRESS Chapter 60: Unboxing Live 2! – Unbox Harder:
Tyler Bate, Chris Brookes, James Drake y Mark Davis derrotaron a Trent Seven, Kid Lykos*, Zack Gibson y Kyle Fletcher en Lucha de Eliminación
*Muñeco de Kid Lykos
Para iniciar la velada tenemos a los 4 equipos principales de PROGRESS en el ring, incluyendo a Brookes y un muñeco de Kid Lykos, quien se encuentra lesionado. Zack Gibson hace otro excelente promo, repudiando el hecho de que haya un muñeco involucrado en las acciones. Smallman explica que tendremos una lucha de 4 vs. 4 de eliminación, con Bate y Seven en bandos opuestos. Ambos eligen de manera cómica a los integrantes de sus respectivos equipos, James Drake es el último en ser elegido, pues Seven prefiere seleccionar al inerte muñeco de Kid Lykos antes que a él.
Me gusta mucho la comedia en lucha libre, incluso creo que Trent Seven es un genio cómico, pero esto fue demasiado hasta para mí. Seguramente los que estuvieron presentes se la pasaron genial, pero en video esta lucha apestó, con momentos demasiado simplones, repetitivos y poco graciosos. Tras un rato de ver a todos aventándose el muñeco de Lykos, el chiste se volvió viejo, sin embargo lo siguieron repitiendo una y otra vez, hasta el punto de la nausea. En resumen, al final Brookes y Seven fueron los últimos en quedar con vida dentro del cuadrilátero, siendo el primero el vencedor final. Si hay algo que puedo destacar de la lucha es a Mark Davis sigue viéndose como una bestia, un hombre con enorme potencial que en un año seguro veremos en plan grande dentro de la empresa.
Jack Sexsmith derrotó a Joe Coffey
El capítulo pasado, Sexsmith ganó una futura oportunidad por el Campeonato de PROGRESS, así que es momento de continuar el push de Jackie para establecerlo como amenaza creíble y futuro campeón mundial. El ‘Iron man’ Joe Coffey fue el primer escalón de Sexsmith en una lucha sólida que nos contó una excelente historia desarrollando de manera importante el personaje de Sexsmith. El punto clave fue ver a Jackie arrepentirse de usar a Mr. Cock-o para mejor encarar a Coffey e iniciar un intercambio de antebrazos; el mensaje fue claro: Sexsmith ya no está jugando, ya no es un luchador de comedia que utiliza condones usados para causarle asco a sus oponentes. No, Jackie Sexsmith está siendo consolidado como un luchador creíble, capaz de vencer a cualquier rival y que va en serio por el Campeonato de PROGRESS.
Tras la sorpresiva victoria, Sexsmith tomó el micrófono para darnos un encantador promo con lágrimas y eterno agradecimiento por todos los que lo ha apoyado. El público le dio una ovación de pie. El promo resumió lo que es Jack Sexsmith: un hombre que nunca es el favorito para ganar, un underdog por excelencia con enorme corazón conformado por un mar de carisma y amor.
Millie McKenzie derrotó a Chakara, Candyfloss, Charlie Morgan, Sierra Loxton y Charli Evans
Candyfloss tiene una tierna música de entrada, el pelo color rosa y carga con un algodón de azúcar al ring. ¿Hay alguna duda de por qué el público ya la ama? Ah, y además durante esta lucha hizo algo muy peculiar: empezó a impulsarse en la cuerda como para hacer un tope suicida pero se le acabó la ‘gasolina’ a medio camino, el crew de PROGRESS rápidamente entró al ring para darle dulces y así ‘llenarle el tanque’; de esa manera, Candyfloss continuó su impulso en las cuerdas para concretar el tope. Oh PROGRESS, te amo.
Jinny estuvo de comentarista invitada, siendo genial como siempre, hablando maravillas de sí misma y brindando valiosas críticas a las seis luchadoras.
La lucha fue dinámica y divertida, lo que suelen llamar un spotfest. Realmente no hubo momento para respirar, pero sí hay valiosas observaciones de las involucradas: Charlie Morgan tiene gran potencial y buena conexión con el público, la ofensiva de Chakara es bella y dolorosa. McKenzie hizo su debut en PROGRESS y rápidamente se estableció como una amenaza en la división con su rapidez y hermosos suplexes. Se notó que McKenzie, quien ya trae recorrido por la escena independiente, estaba por encima de las demás competidoras. La secuencia final fue fantástica, cada luchadora ejecutando algún castigo culminando en McKenzie aplicándole un Ace Crusher y Desnucadora giratoria a Morgan para obtener la victoria.
Mark Haskins y Jimmy Havoc c/Vicky Haskins derrotaron a Clint Marguera y Drew Parker en Lucha de 12 Días de Navidad
PROGRESS inventó esta lucha en la que hay 12 armas disponibles para que los luchadores se intenten destrozar. Claro, es sin descalificación. Además, los oponentes de Havoc y Haskins son Clint Marguera y Drew Parker, dos de los mejores luchadores de deathmatches en Reino Unido, incluso Marguera es considerado mentor y uno de los padres de ese estilo en el territorio.
Sí, la lucha fue sangrienta y sádica. Durante los primeros minutos, Haskins y Havoc utilizaron engrapadoras, papel para hacer cortes y jugo de limón para rematar el dolor de las heridas. Lugo, sin razón alguna los rudos atacaron al referí, pateandolo y atándolo fuera del ring. Marguera y Parker aprovecharon para ragruparse y procedieron a meter buena ofensiva aérea: Parker ejecutó bonitos topes con giro con enorme fluidez. Unos minutos después ya había un montón de bloques LEGO y hasta una televisión en el ring; Haskins se comió un bombazo sobre un árbol de navidad cubierto por alambre de púas. A continuación Havoc fue víctima de dos Death Valley Drivers sobre la televisión, pero con el referí aún atado fuera del ring, la cobertura fue imposible. El desconcierto fue aprovechado por los rudos quienes rápidamente giraron la mesa a su favor y le dieron un Beso de la Muerte a Parker sobre un montón de LEGOs. Para rematar, Havoc y Haskins vacíaron cientos de tachuelas sobre los LEGOs; dicha camita de dolor arropó la espalda de Parker, quien recibió dos Death Valley Drivers pero aún así pudo hacer kickout. Marguera regresó a la lucha para aplicarle a Haskins un Falcon Arrow sobre una silla, pero ante el primer descuido, Havoc lo mandó a comerse una mesa. Vicky Haskins interfirió para distraer a Parker, quien segundos después fue impactado por el bat con púas y de eso, ya no se pudo levantar.
Otra lucha adecuada para establecer a Haskins y Havoc como inmisericordes villanos, aunque todavía sin rumbo aparente: parece que solo están destrozando a todo el que tengan enfrente por placer, algo que, de hecho, no está nada mal. El problema es que mientras Gibson y Drake sean campeones en pareja, Haskins y Havoc no pueden involucrarse en la conversación por dichos cetros. Tal vez la lesión de Kid Lykos y la subsecuente obtención de los campeonatos por Gibson y Drake, haya atrasado una posible rivalidad entre Haskins y Havoc con CCK.
Rampage Brown derrotó a Flash Morgan Webster
Durante la primera mitad de esta lucha el público cantó una versión de ‘12 Días de Navidad’ pero utilizando a Rampage Brown como sujeto de la melodía. Brown se quedó con la boca abierta. El ingenio del público de PROGRESS… no hay nada como ellos.
Flash se ha convertido en un underdog de primer nivel, vendiendo como estrella cada movimiento de sus rivales, generando drama en la narrativa y acercándose a la victoria pero siempre fracasando en obtenerla. La vistosa ofensiva de Brown encajó a la perfección con la narrativa de Flash, quien de nueva cuenta se acercó al triunfo con un Pinball Wizard y un Angel Wings, pero Brown aguantó castigo y minutos después convirtió un Frankensteiner de Flash en un Súper Bombazo, seguido de una Rompecuellos para así llevarse la victoria.
Después de la campana, y de ser reconocido por Brown, Flash Morgan Webster tomó el micrófono para expresar su decepción, diciendo que no no sabe qué lugar tiene en la compañía tras tantas derrotas y que tendría que tomarse un tiempo fuera para pensar las cosas, prometiendo regresar en el futuro. Discretamente Flash Morgan Webster ha sido el mejor luchador de PROGRESS durante los últimos dos meses. Ha perdido todo este tiempo, pero ha ido desarrollando una interesante historia, teniendo excelentes luchas en el camino.
Travis Banks derrotó a Will Ospreay para retener el Campeonato Mundial de PROGRESS
Ahora sí viene una sorpresa fuerte. Tras la entrada de Travis Banks, suena la música de Will Ospreay, quien es recibido por cánticos de ‘Bienvenido de regreso’ y una monumental introducción de Jim Smallman destacando sus numerosos logros, no solo en PROGRESS sino en todo la industria. La lucha será por el Campeonato de PROGRESS.
La lucha es tal vez la mejor que haya visto PROGRESS en todo el 2017. Will Ospreay está simplemente en otro nivel, y trabajó muy bien con Travis Banks: parecía que se comunicaban telepáticamente, pues la velocidad con la que se ejecutaban algunos contraataques era relampagueante. Ospreay vendió como Dios todo lo que Banks le aventó, y así el neozelandés se vio como un titán. Ésta lucha fue la que finalmente consolidó a Travis Banks como un gran campeón de PROGRESS.
Para la recta final de la lucha se dan intensos intercambios de antebrazos, cabezazos y patadas, posteriomente Ospreay intenta el OsCutter pero Banks se le adelanta en las cuerdas y lo recibe con un Slice of Heaven para luego aplicar un Kiwi Crusher, pero el británico levanta el hombro antes de 3. Al levantarse, Ospreay sorprende con un OsCutter, pero sabiamente Banks rueda fuera del cuadrilátero para evitar la derrota. Un desesperado Ospreay lo persigue, mete al ring e intenta castigarlo con una Estrella Fugaz pero Banks lo recibe con un cutter: Ospreay sobrevive el conteo de nuevo pero en cuanto se sacude a Banks, éste coloca el Lion’s Clutch con tal ferocidad que Ospreay tiene que rendirse. Es una lástima que Banks vs. Ospreay haya sido en diciembre 30, una fecha en dónde difícilmente será considerada entre las mejores luchas del 2017, pero vaya que merecería una mención.
Travis Banks toma el micrófono para decir que en el 2018 se enfrentará ante todo retador y en cuanto termina la oración, suena la música de TK Cooper. TK COOPER!!. Su compatriota y amigo no está listo para competir, pero reta a Banks para enfrentarse por el campeonato durante algún punto del 2018. Banks obviamente acepta.
Las sorpresas no han acabado. Si Banks vs. Ospreay era la semiestelar, solo hay una persona que puede estar involucrado en la lucha estelar: Pete Dunne. ¿Y su oponente? Nada más y nada menos que Jack Gallagher. La lucha es por el Campeonato WWE del Reino Unido. Increíble. PROGRESS lo has hecho de nuevo.
Pete Dunne derrotó a Jack Gallagher por el Campeonato WWE del Reino Unido
Estos dos tenían pactada una lucha en PROGRESS: New York por el campeonato de la compañía pero una lesión de Dunne nos privó de ver tan suculento platillo. Lo curioso es que en aquella ocasión Dunne era face y Gallagher era rudo; ahora los papeles se han invertido, con Gallagher siendo todo un rufián y Dunne un favorito del público.
Era muy difícil seguir Banks-Ospreay, pero Dunne y Gallagher hicieron un trabajo espectacular, creando una lucha de por lo menos 4 estrellas. Gallagher luchó con agresividad y propósito, es como si se estuviera sacando todo el estrés provocado por algo. Algo así como un pésimo booking, abominables historias y nulo interés de otra compañía hacia él. ¿Alguna idea?
La primera mitad de la contienda fue una combinación de buen llaveo a ras de lona y agresividad fuera del ring, pues vimos varios movimiento en las sillas del público. Estos dos comenzaron a hacer vistosas secuencias que fueron aumentando el nivel de la lucha. En algún punto, Dunne intentó un Bitter End, solo para que Gallagher lo convirtiera en una guillotina; Dunne logró zafarse, dejando caer a su oponente en un X-Plex para luego posicionarlo en una palanca al brazo, pero Gallagher inmediatamente logró transicionar a un candado en el tobillo. Todo fluido y sin perder tiempo.
Para la secuencia final, Gallagher impacta con un cabezazo a Dunne, dejándolo listo en el esquinero para el Gentleman’s Dropkick, pero Dunne lo atrapa de manera espectacular y le da un bombazo. Minutos después, Gallagher se ha recuperado y coloca al campeón en un Captain’s Hook en la mitad del ring. Eventualmente Dunne se zafa de la llave pero no de aguas profundas, pues Gallagher conecta con el Gentleman’s Dropkick, Dunne apenas logra levantar el hombro antes del tres. Gallagher conecta con otro dropkick e intenta un Captain’s Hook, Dunne se escapa, ejecuta Bitter End, Gallagher hace kickout y Dunne lo remata con otro Bitter End para retener el campeonato. Sí, excelente lucha.
Debo decir que fue un poco deprimente ver a Jack Gallagher en tan espectacular demostración luchística, pues me hace pensar en todas las buenas luchas de Gallagher que nos estamos perdiendo, no solo en PROGRESS sino en todo el planeta, pues estoy seguro de que el hombre sería contratado en decenas de promociones independientes.
PROGRESS es una empresa que sabe sorprendernos de mil y un maneras: Chapter 60 fue una noche que elevó su nivel gracias a esa magia que tiene la empresa. Ospreay vs. Banks y Dunne vs. Gallagher fueron dos inesperadas luchas que fácilmente podrían provocar un lleno total en cualquier show independiente en Reino Unido pero como PROGRESS ya tiene todas sus funciones agotadas con meses de anticipación, se pueden dar lujos de hacer este tipo de espectaculares luchas sin anunciarlas.
Chapter 60 fue uno de los mejores eventos que tuvo PROGRESS en el 2017 y hasta me atrevo a meterlo en un top 20 de funciones alrededor del planeta. Además, tuvimos grandes desarrollos de historias y personajes: Gallagher comenzó un ascenso a la cima de la empresa, Havoc y Haskins siguen estableciéndose como detestables rudos, además de que media decena de luchadoras tuvieron oportunidad de probarse e impresionarnos. Quitando la primera lucha, Unboxing Live 2.0 fue excepcional.