Un amplio trabajo sicológico realizan en torno a Arturo Vidal, con el objetivo de dejar atrás el negro episodio que vivió la noche del martes, en la que chocó su Ferrari en estado de ebriedad.
Si ayer fue su madre, Jacqueline Pardo, quien llegó hasta Juan Pinto Durán, hoy fue el turno de su mujer María Teresa Matus junto a su hijo Alonso, quienes llegaron cerca de las 14:00 para estar con el futbolista.
El objetivo es entregar apoyo a la estrella de la Roja y la Juventus, para olvidar cuanto antes el duro momento que vivió, que incluso lo llevó ayer a ofrecer disculpas públicas al cuerpo técnico y a sus compañeros.
Este suceso se calificó como excepcional dentro del régimen de la Roja, considerando que no existe autorización de parte del cuerpo técnico para recibir visitas de familiares.