La clase 2018 del Salón de la Fama WWE se ve muy fuerte, pues tiene ya como cabeza a Bill Goldberg, además de los Dudley Boyz, la veterana Ivory y de —sorpresivamente—el polémico Jeff Jarrett.
Quedan al menos dos nombres más que serán revelados en las próximas semanas, pero como lo dimos a conocer el año pasado, la lista preliminar de elegidos fue filtrada por Brad Shepard, editor de BodySlam.com. En su momento, Dave Meltzer confirmó que la lista era verídica, y en ella figuraban ya todos los anunciados, con excepción de Jarrett, quien fue una decisión de última hora tomada por Triple H aprovechando que el luchador sureño se acogió al programa de rehabilitación financiado por WWE.
Los nombres que faltan en la lista de Shepard son el cantante Kid Rock y el fallecido Bam Bam Bigelow, quien fue todo un trotamundos, triunfando en New Japan, en México, en la WCW, en ECW y, por supuesto, en WWE.
De Bigelow ya se había dicho mucho sobre su segura inducción, pero hasta ahora no se había hecho porque Vince McMahon prefiere limitar el número de inducciones póstumas, y éstas suelen darse a estrellas de la zona en donde se celebre WrestleMania.
Hay un nombre más que habíamos mencionado como rumor, el de Atsushi Onita, quien fue el luchador más taquillero del mundo a principios de los noventas, convirtiendo a la FMW de Japón en todo un fenómeno. Se puede argumentar que nunca trabajó para WWE y que su estilo hardcore no es compatible con WWE, pero es el miso caso con Abdullah the Butcher, y éste sí fue llevado al Salón de la Fama. Sin embargo, una eventual llegada de Onita podría ser más probable si WrestleMania se lleva a cabo en Tennessee o en Florida, pues fueron los territorios en los que el japonés luchó durante los ochentas.